Hablar de Troy Corser es hablar de una de las más grandes figuras del motociclismo. El piloto australiano, conocido como “El Cocodrilo” compitió durante su carrera deportiva en el WorldSBK, en el campeonato australiano de Superbikes y en el AMA, además de una temporada en la categoría de 500 c.c. del Mundial de Motociclismo. Corser es bicampeón de Superbikes: el primer título lo ganó en 1996 y el siguiente, nueve años después, en 2005.
Primera etapa (1992-1996): el primer título
Su debut en el Campeonato de Superbikes llegó en 1992, a bordo de una Yamaha. Corser disputó solo cuatro carreras esa temporada y sumó catorce puntos. Su siguiente aparición en la parrilla del WorldSBK sería en 1994, para disputar un total de ocho carreras, en las que consiguió cinco podios y terminó undécimo en la clasificación. Si en solo ocho carreras el australiano había podido conseguir cinco podios, ¿qué podría conseguir en una temporada completa? Las dudas se despejaron por fin en 1995.
En la temporada 1995, Troy Corser se enfrentó a su primera campaña completa en el Campeonato del Mundo de Superbikes. Participó en 24 carreras en total y consiguió quince podios, repartidos en cuatro victorias, cinco segundas posiciones y seis terceras. Primera temporada completa y Corser se hizo con el subcampeonato del mundo. Una prueba irrefutable del talento innato del “Cocodrilo”. Pero su consagración como uno de los pilotos más importantes de la época, si es que aún hacía falta, llegaría en 1996, cuando en su segunda temporada en Superbikes, Troy Corser se hizo con el campeonato del mundo, compitiendo con una Ducati. En esta ocasión, consiguió un total de trece podios, de los cuales siete subió a lo más alto.
El salto a 500c.c. y su regreso a Superbikes
En el 97, Corser inició su aventura en la categoría de 500 c.c. del Mundial de Motociclismo, sin mucho éxito para el australiano. Disputó un total de siete carreras con Yamaha, en las que su mejor resultado fue un duodécimo puesto. Después de estas siete carreras, el australiano solo contaba con once puntos en su casillero y ocupaba la vigésimo tercera posición de la clasificación general.
Volvió a Superbikes, donde compitió de forma ininterrumpida durante cuatro temporadas. Desde 1998 al 2000, Troy Corser terminó el campeonato en tercera posición, mientras que en 2001 fue cuarto. Durante estos cuatro años, acumuló un total de 45 podios, de los cuales 12 fueron victorias. En esta etapa, el australiano compitió sobre una Ducati hasta que en el año 2000 fichó por Aprilia.
Para Troy Corser, 2002 fue un paréntesis durante el que se centró en el desarrollo de la que sería su moto durante la temporada 2003: la Foggy Petronas. Pero este cambio no le trajo muy buenos resultados durante las dos temporadas que duró este proyecto: en 2003 no consiguió ningún podio y terminó duodécimo en la clasificación; 2004 supuso una leve mejora y consiguió una segunda posición, terminando en el noveno puesto de la clasificación general. Una apuesta arriesgada que, de haber salido bien, hubiese agrandando aún más la leyenda del australiano.
Última etapa (2005-2011): otra corona más
En 2005 dio comienzo su última etapa en el campeonato. Corser recaló en las filas de Suzuki y en su primera temporada con la marca japonesa, se hizo, de nuevo, con el título de campeón. Consiguió un total de dieciocho podios, de los cuales ocho fueron victorias. Esa fue su mejor temporada en cuanto a resultados. A partir de aquí, comenzó el ocaso de Troy Corser. En 2006 no pudo revalidar el título y terminó cuarto, con solo dos victorias, las dos últimas del australiano en Superbikes. En 2007, dio el salto al equipo oficial de Yamaha y terminó la temporada con nueve podios y en quinto lugar en la clasificación. En 2008 continuó con la marca nipona y consiguió subir en trece ocasiones al cajón y llevarse el subcampeonato.
En 2009, Troy Corser pasó a formar parte del equipo de BMW, compartiendo box con Rubén Xaus, otro de los grandes nombres del WorldSBK. En este equipo pasaría sus tres últimas temporadas en el campeonato, sin subir al podio ni pasar de la undécima posición en la clasificación general, hasta que en el año 2011 anunció su retirada de la competición.
En todos los años, casi 20, que el piloto australiano compitió en el WorldSBK, ha dejado un palmarés importante: dos títulos y dos subcampeonatos, 43 poles, 33 victorias y 97 podios. Todo ello repartido entre las 377 carreras que disputó en la categoría. Y sin olvidar los duelos con los grandes pilotos de la época. Troy Corser ha dejado huella en la competición y ha dado motivos más que suficientes para ser considerado una leyenda del WorldSBK.
