Matt Murray volvía a la portería de los Pittsburgh Penguins tras superar la lesión sufrida durante el calentamiento del primer partido de primera ronda de los playoffs, en su lugar Marc-Andre Fleury había cogido las riendas pero su mala actuación en el choque anterior había puesto en entredicho su titularidad en el cuarto encuentro.

Con la premisa de sumar la segunda victoria, los Pens acudían al match frente a los Ottawa Senators con aires renovados, algo que finalmente les funcionaría bien, forzando la serie, como mínimo, llegue hasta el sexto partido.

El choque daba comienzo y parecía que los Sens se encontraban a gusto dentro del hielo, fruto de esto disfrutarían de dos ocasiones claras pero en ambos casos un inspirado Murray conseguiría evitar el gol, algo que no podría hacer Craig Anderson con un disparo al primer palo del defensor Olli Matta, después de una gran internada de este último. Pittsburgh se ponía arriba en el marcador a pocos segundo de terminar el primer periodo.

En la reanudación, primero Sidney Crosby y más tarde Brian Dumoulin, dejarían el luminoso con una ventaja de tres goles para los visitantes. Crosby aprovecharía un gran pase para anotar el segundo en un tiro de fortuna, al igual que Dumoulin, un disparo suyo desde la línea azul rebotaría en el patín de Dion Phaneuf y se colaría al fondo de las mallas. Lejos de amilanarse, Ottawa apretaría y tras una gran conducción de pastilla de Bobby Ryan, Clarke MacArthur mandaría el puck dentro de la portería visitante, dejando el uno a tres a falta de veinte minutos para disputarse.

Los minutos pasaban y no se movía el marcador, Phil Kessel dispondría de una clara ocasión para sentenciar pero Anderson le pararía bien el disparo. En ello los Senators aprovecharían para meterse de nuevo en el choque tras un disparo típico de Erik Karlsson, el cuál redireccionaría un par de veces y acabaría en gol mediante el stick de Tom Pyatt. Los canadienses acabarían el partido en power play pero no conseguirían marcar y los Penguins se llevarían una merecida victoria.

Ottawa finalizaría el encuentro con un cero de cuatro en superioridad numérica, extendiendo la racha negativa en power play, la cuál ya se eleva a las 25 últimas oportunidades sin anotar gol.

Triunfo muy importante de los Pens, igualando a dos la final del Este a la espera de ver el próximo domingo que equipo se pone a una victoria de alcanzar la gran final de la Stanley Cup.

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