Previa Pittsburgh Penguins - Nashville Predators: dos caminos, un objetivo

El viaje que comenzó en Octubre y que tras 82 partidos de fase regular y tres series de eliminatorias, llega a su última etapa, la gran final por la Stanley Cup, con sus dos protagonistas ya elegidos, unos más esperados que otros al inicio del mes de Abril. Pero a finales de Mayo, se puede decir que han llegado los competidores más hábiles y más resistentes por cada una de las conferencias, lo que nos promete un espectáculo de hockey para cerrar la temporada.

Pittsburgh Penguins: favoritismo por derecho propio

En Junio de 2016, Sidney Crosby alzaba la Stanley Cup tras una temporada que comenzó de manera desastrosa, pero que bajo la guía de Mike Sullivan pasó el desastre al éxito. Una vez acabada la temporada, se mantuvo el núcleo duro de jugadores que fueron la base de ese triunfo, por lo que los Penguins partían en el selecto grupo de favoritos para ser campeones en 2017.

Así que el hecho de que se hayan plantado en la gran final y tenga la posibilidad de repetir título, algo que no se consigue desde que lo hiciera Detroit en 1997 y 1998, puede parecer un hecho lógico y carente de interés o emoción, pero nada más lejos de la realidad, estos Penguins han trabajado muy duro hasta llegar aquí.

Una temporada regular plagada de lesiones, pero Sullivan ha sabido gestionar su plantilla con gran habilidad para conseguir el segundo registro de la liga. Habilidad que ha seguido demostrando durante las lógicas lesiones que se han ido produciendo por la intensidad y continuidad de partidos de las series eliminatorias, manteniendo un rendimiento constante desde el principio hasta ahora.

Lesionado en el calentamiento del primer partido frente a Columbus, Matt Murray vuelve a defender la portería. Tras relevar a Marc-André Fleury en el tercer partido de la final del Este frente a Ottawa, ha demostrado que ese reposo forzado no le ha pasado factura y sus actuaciones le han dado aún más seguridad a su equipo.

En defensa Justin Schultz ha tomado los galones que dejó el caído Kris Letang. Este, acompañado de un sobresaliente Olli Maatta, de un Trevor Daley al 110 por ciento y Brian Dumoulin, han hecho que aunque la defensa sea la parte más débil del equipo, el equipo no se haya desmoronado por esa faceta.

En ataque tenemos el festival de creatividad liderado por los jugadores franquicia, Sidney Crosby y Evgeni Malkin, que respaldados por los veteranos y curtidos en playoffs como Phil Kessel o Chris Kunitz, el especialista del slot Patric Hornqvist e incluso el novato Jake Guentzel, pueden convertir en pesadilla la noche de cualquier portero rival.

Tras eliminar a los Columbus Blue Jackets, la mayor revelación de la temporada regular, a la tormenta anotadora de los Washington Capitals y a los mejores representantes del hockey físico y de choque actuales, los Ottawa Senators, Crosby y compañía tienen derecho a reclamar el favoritismo en la serie final.

En su contra, dos series consecutivas a siete partidos con el desgaste físico y mental que conllevan, pero el hecho de haberlas superado y el ser actuales campeones, limita un daño que sería fatal para cualquier otro equipo.

Nashville Predators: inferiores a nadie

Agarrándose al último wild card de la conferencia Oeste, y con el peor registro de los 16 equipos que afrontaban las eliminatorias, parecía a principios de Abril que el destino de los Predators sería ganar un par de partidos y apretar las manos de unos Chicago Blackhawks que seguirían una senda hacia el título.

Pero Peter Laviolette tenía unos planes que diferían mucho de unas vacaciones tempranas para sus muchachos, y doce victorias después, por primera vez en la historia de la franquicia, los Nashville Predators coserán el parche de finalista en sus camisetas, y lo que es más importante, con opción a ganar el trofeo.

Y es que Pekka Rinne está en un estado de forma excepcional y con unos números que le sitúan como el mejor portero de los playoffs de 2017. Números posibles gracias a una defensa capaz de poner intensidad sobre los delanteros contrarios y también de anotar, PK Subban, Ryan Ellis o Roman Josi no se limitan a cerrar la línea azul cuándo están en campo contrario.

Más dudas genera el ataque con las bajas de Ryan Johansen, máximo anotador del equipo y Mike Fisher, pero aun así Viktor Arvidsson y Filip Forsberg tienen suficiente capacidad de generar peligro como para amargar a cualquier equipo que no se enfrente a ellos con el cien por cien de intensidad.

Nashville ya está preparada para el gran acontecimiento. Foto: NHL

Con menos partidos disputados y más días de descanso, llegan más enteros que unos Penguins que tras dos eliminatorias a siete partidos, llegan con el depósito de gasolina cercano a la reserva. Sin nada que perder, y una ciudad enloquecida y enferma de hockey apoyándoles, están muy lejos de ser esa cenicienta que algunos veían al comienzo del camino.

Enfrentamientos en temporada regular

22/10/2016 Nashville Predators 5 – 1 Pittsburgh Penguins

31/01/2017 Pittsburgh Penguins 4 – 2 Nashville Predators

Victoria para los equipos de casa en los dos enfrentamientos de la temporada regular entre ambos equipos, lo que unido a lo ya demostrado por ambos en playoffs, hace que el conseguir botín en campo contrario pueda ser un factor más que decisivo en esta serie.

Penguins con su talento en ataque y superioridad en ataques especiales para compensar su no tan fuerte defensa y el cansancio físico, y Predators intensos y fuertes en defensa y que tirarán de fondo de armario para aliviar sus bajas en la delantera, nos garantizan una final de las que nos harán ir al trabajo por la mañana, con pocas horas de sueño pero felices y llenos de hockey.