El tenis español casi se queda sin representación en el ATP 250 de Lyon, torneo que se disputa sobre tierra batida y que supone el último ensayo de cara al segundo Grand Slam del año, Roland Garros, que dará comienzo este próximo domingo. Roberto Bautista, segundo cabeza de serie del cuadro, tuvo que sudar y mucho para vencer la resistencia del tenista local Corentin Moutet, número 117 del ránking ATP e invitado por la organización. En su primer partido en el cuadro individual, el español pagó su correspondiente adaptación con la pérdida del primer set pero tiró de oficio para ganar los dos siguientes y colarse en la siguiente ronda por un marcador final de 4-6 6-4 y 6-3 tras dos horas y veinte minutos de juego. 

No fue un partido nada bueno al servicio por parte de ambos. Hasta once roturas de saque se produjeron, cinco para Moutet y seis para Bautista

Motivado al jugar ante su público y envalentonado al haber conseguido ya una victoria en el torneo, Moutet quiso hacer lo propio con Bautista y aprovechó las crecientes dudas de éste en su peor superficie para soñar con la victoria. El galo, zurdo y de 20 años, no dispone de ningún punto fuerte a nivel ofensivo en su juego pero lo compensa con una buena actitud que lo puede convertir en un jugador correoso de cara al futuro. El primer set cayó en su poder por 6-4 tras romper por partida doble el saque de un Bautista un tanto encogido y sin dar muestra de tener buenas sensaciones. 

Pero tras ese primer disgusto, la esperada reacción de uno de los principales candidatos al título no se hizo esperar. Tampoco fue antológica, ni mucho menos, pero lo suficiente para ir arreglando el desaguisado poco a poco. El castellonense necesitó de tres 'breaks' para llevarse esta segunda manga, puesto que ni con 3-1 ni, posteriormente, con 5-3 pudo hacerlo. Tuvo que ser al resto, lo mejor que hizo en el partido, donde Bautista firmara las tablas devolviendo el 6-4 a su rival. 

El mismo guión se repitió en el último parcial. Sin grandes alardes pero tirando de experiencia cuando la cosa se puso difícil, el pupilo de Pepe Vendrell terminó logrando su objetivo con un 6-3 final en un choque que se hasta los 140 minutos de duración. No ha sido el estreno perfecto, pero si a algo nos tiene acostumbrados el bueno de Roberto es a subir su nivel conforme las rondas van avanzando, algo que necesitará en la siguiente ronda, los cuartos de final, para doblegar al estadounidense Taylor Fritz, 46 del mundo y que accedió a dicha ronda sin jugar, beneficiándose del abandono de otro francés, Richard Gasquet.