Según la mitología azteca, Tlaloc representaba la lluvia y el trueno en la cosmología de estos seres sobrenaturales. Así como podía dar el don de la virtud y la providencia, podía tener una fuerza destructiva que arrasaba a los que lo merecían. Hoy parece ser queCruz Azul tuvo un poco de esa destrucción en la figura de los Rojinegros del Atlas, quienes necesitaban los tres puntos de manera desesperada para alejarse de su perseguidor más cercano que son los Potros de Hierro del Atlante.

Daba la hora del partido y el dios azteca ya había aparecido en el cielo para demostrar su poder ante los aficionados y los jugadores en la cancha del Estadio Azul. Un tremendo aguacero vino a aflojar un poco el terreno de juego antes del partido y al momento del silbatazo inicial todavía se podía avisar ciertas gotas y un presagio de que a los cementeros iban a pasarla realmente mal, sobre todo en la defensa.

Porque el Atlas empezó con todo al ataque y al 3’ Maikón Leite trató de descargar conOrtigoza que solo pudo chocar el balón y fortuitamente la dejó pintada para el joven canterano Barragan que sacó un increíble disparo casi al ángulo que Corona no pudo ni siquiera alcanzar. La sorpresa iba tomando forma en el Azul con el 0-1 y a los aficionados que habían hecho una entrada decorosa a pesar del clima y el rival en turno.

Aunque parecía que los cruzazulinos no iban a quedarse con los brazos cruzados. Dos llegadas importantes de Formica y Pavone fueron tapadas por un Federico Vilar que también tuvo un día maravilloso. Solo el gol al 14’ de Marco Fabián para el 1-1después de un tiro de esquina en dos toques manchó un poco la actuación defensiva de los zorros.

Fue entonces que Cruz Azul tomó por fin el liderazgo del partido. Trato de ahogar a los jaliscienses con varias llegadas, aunque ninguna tuvo un real peligro para el arco de Vilar. El juego del Atlas pasó a ser de contragolpes poderosos y uno de ellos lo aprovechó perfectamente Maikon al 32’ para el 1-2.  Una gran jugada individual y una definición rápida, junto con la colaboración de Corona volvieron a dar la ventaja a los Zorros que no la volverían a perder en todo el partido.

Los cementeros empezaron a dar entonces un concierto de errores interpretados principalmente por Torrado y Perea, quienes dieron uno de sus peores partidos con la institución cementera. Tanto así que al 44’, una de las tantas pelotas perdidas por el mediocampista mexicano fue a dar a los pies de un rojinegro quien mandó el centro y encontró de nueva cuenta a Barragán que con una finta se quitó a Corona y disparó milimétricamente para vencer a Chávez que se había metido en la última línea para tratar de contener lo inevitable. El resultado de 1-3 y todo un tiempo para defender el triunfo.

En el segundo tiempo, Atlas dominó inteligentemente el partido. Dejó todavía que Cruz Azul los atacara, aunque estos llegaban sin idea alguna a territorio rival. Fue entonces que llegó mejor el tiempo de darle a Pablo Barrera minutos para que retomara el ritmo. Incluso la entrada de Achille Emana, hombre que no había visto actividad en un buen tiempo, dio el mensaje de que la Máquina entendía que era muy difícil doblegar de nueva cuenta el arco de la Academia.

El tiempo se diluyó y el árbitro dio por terminado el partido. Al final los rojinegros festejaban alejarse del Atlante por siete puntos y un buen paso como visitante en esteClausura 2014 de la Liga Bancomer MX. Para el Cruz Azul, el ataque de Tlalocen el clima y en la cancha debe de ser un buen aviso para afinar detalle rumbo a la liguilla en donde prácticamente estarán peleando por el título.