Una vibrante edición del Clásico Regio, fue la que se vivió en la cancha del Estadio Universitario donde Tigres y Rayados culminaron 1-1 en la fecha 15 del Apertura 2016.

La Sultana del Norte quedó paralizada una vez más por 90 minutos, las avenidas más transitadas de la ciudad del norte mexicano lucían completamente vacías y los hogares, bares y restaurantes a tope para presenciar el choque fraternal.

Con la premura de que estaban obligados a sumar para mantener aspiraciones de Liguilla, Monterrey salió con todo en el “Volcán” y sorprendió a propios y extraños.

La primera se presentó en ataque aéreo con remate de José María Basanta al 13’ de acción; la pelota terminó en el travesaño pero era un indicio de que ‘La Pandilla’ no iba a especular en territorio enemigo.

Tan solo siete minutos después, una de las más claras para los albiazules en todo el partido. En trazo largo, Dorlán Pabón dejó el esférico a merced para Yimmi Chará, que con un disparo cruzado, ya había batido a Nahuel Guzmán, pero el esférico fue a dar al poste para mala fortuna de los elementos de Antonio Mohamed.

Poco a poco el local se fue asentando y retomó la posesión del esférico con proyección ofensiva, misma que terminó dando frutos de algarabía incomparable. Al 39’, Ismael Sosa remató de forma inmejorable un trazo por izquierda y Alexander Domínguez por más que se estiró, no pudo contener la pelota y el gol estaba consumado; 1-0 el local al descanso.

El complemento pintaba interesante, puesto que Rayados había dado una buena cara y no iba a permitir que el duelo por el orgullo se les fuera tan fácil. Por su parte los auriazules querían brindar una mayor satisfacción a su hinchada.

Minuto 58, aviso de los elementos del ‘Tuca’ con tremendo disparo de Sosa al cual ‘Dida’ Domínguez respondió con creces para mandar a córner.

Posteriormente el ‘Turco’ no lo pensó dos veces y ante la urgencia de sumar, soltó un contención; Walter Gargano ya amonestado tuvo que abandonar el terreno de juego para ver un Monterrey todavía más ofensivo.

Al 71’ respiro albiazul; un disparo fuerte de César Montes fue desviado por el hombre de la polémica; Guido Pizarro se convirtió en villano y Guzmán nada pudo hacer ante el paso de la pelota.

A partir de ahí el encuentro se tornó tenso, inclusive viendo a los felinos hacer tiempo para evitar una caída y Monterrey insistiendo para poder sumar de a tres.

La jugada clave del encuentro tuvo que venir en el ocaso y suspenso del partido, una pelota que le quedó a mercer a Iván Piris dentro del área, la impactó con total potencia pero Guzmán supo contener atrás sin mayor problema.

Silbatazo final de Fernando Guerrero y Tigres prácticamente amarró en Liguilla mientras que Rayados debe empezar a jugar con la calculadora en el último par de fechas.