Luego de unos largos nueves meses, Lucas Bernardi volvió a figurar en los medios, abriéndose de par en par con el Diario La Capital. En una fructífera entrevista, habló sobre su carrera como jugador, su paso como entrenador de Newell's, entre otras cosas.
Comenzó hablando del momento en el que regresó a la Argentina para vestir la camiseta de Leprosa, a lo que comentó: "Era un sueño que tenía como jugador, el de terminar mi carrera en Newell's. Se fueron acomodando un montón de cosas. Yo tenía muchas ganas de volver y el agotamiento de estar tantos años afuera fueron decisivos".
Teniendo en cuenta el salario que tenía en ese entonces, expresó que no volvió por lo económico, sino que lo hizo para cumplir su sueño. Recordando el titulo logrado con Gerardo Martino a la cabeza, confesó: "Fue el momento que más disfruté como futbolista. Porque más allá de las exigencias disfruté los entrenamientos, jugar los partidos y haber logrado un campeonato con Newell's".
Cerrando el tema, sobre la oferta que le hicieron de hacer un partido de despedida, confesó: "Dije que no porque tuve una demostración genuina, espontánea del hincha en esa ocasión, ya que cuando terminó el partido se quedaron para saludarme porque quisieron, nadie los obligó, fue genuino y eso es inolvidable".
En cuanto al momento que aceptó ser entrenador de Newell's, dijo que no se arrepiente, pero que fue una decisión sin pensar. "Alguien me dijo una vez que las decisiones son buenas o malas en el momento de tomarlas, después con el diario del lunes es más fácil opinar. El desenlace no tiene que ver con esa decisión, tal vez sí con otras", agregó.
Acerca del rendimiento que tenía su equipo, comentó: "Hemos intentado tratar bien el balón, valorar la posesión, darle circulación, pero también es cierto que las circunstancias modificaron varias veces las intenciones por una necesidad. Paradójicamente la idea fue plasmada rápidamente en el primer partido con Racing y luego apareció por momentos en otros cotejos".
También destacó lo difícil que es dirigir a ex compañeros, ya que el entrenador es quien toma las decisiones y cuando tomas decisiones en función del equipo puede darse conflictos o no. "Si por jugar o no jugar se rompe una amistad es porque esa amistad nunca existió", agregó.
El ex capitán Leproso se mostró entusiasmado pensando en alguna chance de volver a dirigir, diciendo que cuando aparezca alguna oportunidad de hacerlo, ahí estará.
Sin lugar a dudas y pensando en lo hablado, sintetizó todo en una frase: "No me arrepiento de haber vuelto como jugador y de aceptar dirigir".
Finalmente, confesó: "Hoy lo que siento es que necesito estar por las ganas de aprender, de charlar con los más experimentados, de poder ayudar a los más jóvenes, de dirigir, de poder armar un equipo. De poder disfrutar".