El Gipuzkoa Basket volvió a caer derrotado en la segunda jornada de la Liga Endesa. Esta vez el verdugo fue el todopoderoso Real Madrid, aspirante a ganarlo todo esta campaña después de levantar hace dos semanas la Supercopa Endesa en Vitoria. Una derrota que, sin embargo, dejó muy buenas sensaciones visto el nivel que ofrecieron los hombres de Jaume Ponsarnau durante los cuarenta minutos del encuentro.
El técnico del equipo donostiarra etiquetó al conjunto merengue como un rival "excelente para crecer", y así fue. El GBC creció respecto a lo ofrecido la semana pasada ante el Tuenti Móvil Estudiantes. Creció en intensidad, en juego, en compromiso, en anotación, en competitividad... creció en todo lo que podía crecer. Plantó cara al equipo blanco desde el principio y no perdió un cuarto por más de cinco puntos, sólo el primero (23-28).
Luchar, creer y competir en todo momento
Los locales jugaron bien y estuvieron en muchos momentos dentro del partido, exceptuando la inspiración merengue en momentos clave como el retorno de los vestuarios que pusieron casi veinte puntos de ventaja (43-61). A pesar de ello no se rindieron. Lucharon, creyeron, compitieron y rebajaron la ventaja a menos de diez puntos para creer en una remontada heroica que minutos antes se veía imposible.
Al final, se impuso la calidad y la larga plantilla del Real Madrid. Un equipo plagado de estrellas que sudó y sufrió ante un GBC que, esta vez con buena aportación desde el banquillo, no se lo puso nada fácil a los pupilos de Pablo Laso para conseguir el segundo triunfo de la temporada. Mención especial a Will Hanley, autor de 18 puntos y el líder en todo momento de los vascos para luchar por el partido.
Dos encuentros, dos derrotas. Éste es ahora mismo el balance del Gipuzkoa Basket en las dos primeras semanas de la Liga Endesa. Un balance negativo, aunque visto lo visto en el Donostia Arena 2016 ante los blancos la esperanza y la ilusión por un futuro mejor están más vivas que nunca. Si los de Ponsarnau, que todavía tienen margen de mejora, siguen esta línea y mejorar los matices, volverán a competir ante cualquier rival y llegarán las victorias.