Porfi Fisac, después de consumarse el descenso del RETAbet Gipuzkoa Basket en Badalona al caer ante el FIATC Joventut (90-88), manifestó en rueda de prensa que se trataba de un momento difícil y que no había sido capaz de llevar al equipo a la permanencia tras su llegada en relevo de Jaume Ponsarnau: “Pido disculpas. Es un día duro y se me hace bastante complicado entender que me trajeron para una responsabilidad, pero que no he sido capaz de llevar este barco a buen puerto. Como máximo responsable de este equipo es un momento difícil. Estoy encantado con el esfuerzo, entrega y sacrificio de los jugadores. Quedan tres partidos, en los que vamos a ser muy honestos y honrados con el club y con nuestra afición. No nos vamos a entregar”.
Por otro lado, en declaraciones que recoge también Noticias de Gipuzkoa, Nekane Arzallus, presidenta del club donostiarra, señaló que se había tratado de una dura campaña desde verano: “Ha sido una temporada muy dura, incluso la pretemporada. Tengo que dar las gracias a aficionados y patrocinadores y a la vez pedirles perdón por el descenso. Quedan tres partidos y vamos a seguir luchando hasta el final”.
Arzallus, que estuvo acompañada en el Olimpic por el presidente de honor del club Miguel Santos, lamentó la derrota, aunque dejó claro que seguirán luchando en las tres últimas jornadas: “Hemos hecho un partidazo. Ha sido injusto quedarnos hoy sin premio porque los jugadores han hecho un esfuerzo tremendo. Quiero destacar la labor de jugadores y técnicos. Ha habido partidos esta temporada que no hemos merecido ganar, pero hoy sí”. El RETAbet Gipuzkoa Basket, ya con el descenso matemático a LEB la próxima temporada, encara los partidos ante Unicaja, Manresa y Estudiantes con el objetivo de dar lo mejor de sí y buscar el mayor número de victorias posibles para acabar la campaña de la mejor manera.