Fulham y la crónica de un naufragio no anunciado

Muchos esperaban un protagonismo mayor del Fulham en esta temporada de Premier League, su regreso a la máxima categoría. Sin embargo, los ahora dirigidos por Claudio Ranieri han decepcionado hasta aquí y su futuro parece ser cada vez menos auspicioso.

Fulham y la crónica de un naufragio no anunciado
Fulham no levanta la cabeza y la lucha por no descender ha comenzado | Foto: Premier League
lucas-romeo
Por Lucas Romeo

Últimos, con solo cinco unidades sumadas en 12 partidos y seriamente comprometidos con la zona de descenso al Championship, la temporada 2018/19 está muy lejos de ser lo que todos los fanáticos de Fulham soñaban, especialmente después de lo que fue la gran previa del regreso de los de Craven Cottage a la máxima categoría del fútbol inglés.

Los motivos son muchos, pero las soluciones parecen ser pocas, y el destino de Fulham solo parece ser regresar a la división que esperaron despedir de una vez y para siempre, pero que hoy miran cada vez más de reojo debido al penoso presente que atraviesan.

En el siguiente reportaje, habrá un repaso de lo que fue el mercado de fichajes del Fulham, con muchas incorporaciones, pero pocas soluciones, además de un análisis por las formaciones elegidas y el estilo de juego que Jokanovic pregonó a su equipo, jornada tras jornada.

¿Fue el mercado de fichajes ideal?

109 millones de euros invirtió el Fulham en el mercado de fichajes con la esperanza de sumar piezas indiscutibles que pudieran darle el salto de calidad necesario. Así llegaron, por ejemplo, Jean Michaël Seri, proveniente del OGC Nice, un mediocampista llamado a ser una de las mejores apariciones del fútbol francés en los años recientes, llegando a ser tentado incluso por el propio FC Barcelona, pero aterrizando en Craven Cottage junto con su compañero, Maxime Le Marchand.

Schürrle llegó como una pieza de mucha experiencia | Foto: Premier League
Schürrle llegó como una pieza de mucha experiencia | Foto: Premier League

André Zambo Anguissa, Aleksandar Mitrovic, Alfie Mawson y Joe Bryan fueron algunos de los nombres por los que la directiva del Fulham invirtió muchísimo dinero para reforzarse, mientras que acudió a los préstamos de algunas “piezas sueltas” de otros equipos, como Calum Chambers, del Arsenal, Luciano Vietto, Sergio Rico y el campeón del mundo, André Schürrle, quien llegaba ya con la experiencia de haber vestido la camiseta del Chelsea, ni más ni menos.

La injerencia del estilo de juego

La formación más elegida por el entrenador durante la presente temporada fue un 4-3-3, una formación bastante pretenciosa y de poco equilibrio para un equipo que recién asciende a la máxima categoría del fútbol inglés, donde durante los últimos años, varias plantillas se han acomodado ya a un estilo de juego, una idea, y es difícil competir contra ellos de igual a igual, por más ambición que se tenga.

En el primer encuentro de la temporada, Slavisa Jokanovic decidió alinear un 4-3-3 ofensivo, que mutaba a un 4-1-4-1 a la hora de retroceder en defensa. Fabri en la portería; Cyrus Christie, Calum Chambers, Maxime Le Marchand y Joe Bryan fueron la defensa titular; en el mediocampo formaron con Kevin McDonald como central, más Tom Cairney y Jean Michael Seri adelantados; por último, los protagonistas de los extremos fueron Ryan Sessegnon y André Schürrle, con Aleksandar Mitrovic como único punta.

El Fulham obtuvo una aplastante posesión de 62% pero su ineficacia de cara a la portería rival acabó costándole caro, ya que de 14 remates solo seis fueron dirigidos entre los tres postes. De esta forma, comenzaba a mostrarse una tendencia de los de Jokanovic a dominar los encuentros, pero sin las ideas ni profundidad necesarias como para quedarse con los tres puntos. Además, se los notaba particularmente flojos a la hora de retroceder en los contragolpes rivales, justamente frente al Crystal Palace, un rival que sabe aprovechar esa vía.

Uno de los puntos bajos del Fulham está en la poca eficacia de sus delanteros | Foto: Premier League
Uno de los puntos bajos del Fulham está en la poca eficacia de sus delanteros | Foto: Premier League

En los siguientes encuentros, Jokanovic mantuvo su idea, cayendo por 3-1 ante Tottenham y triunfando 4-2 ante Burnley, la única victoria en lo que va de temporada. Ante Brighton mutó al 4-1-4-1 bien definido e igualó 2-2, en una actuación que pudo haber mantenido para el siguiente gran duelo, ante Manchester City. Pero el entrenador pecó de ambicioso y los de Guardiola no perdonaron con un categórico 3-0 casi sin despeinarse.

Si se busca un punto de quiebre, definitivamente fue la idea netamente defensiva que eligió plantear ante Arsenal, relegando la posesión y el protagonismo que se le podía destacar por un juego más mezquino y cuidado en exceso. Marcus Bettinelli fue el portero; Denis Odoi, Tim Ream y Maxime Le Marchand los centrales, con Ryan Sessegnon y Cyrus Christie como “falsos laterales”. Por supuesto, jugar con dos futbolistas más enfocados en el ataque y darles vocación de retroceso, más defensiva, fue una invitación a que los de Emery explotasen las bandas a su favor.

El entrenador ya no sabe cómo enderezar el rumbo | Foto: Premier League
El entrenador no supo cómo enderezar el rumbo | Foto: Premier League

La presión en la frontal fue incesante, pero el 5-2-3 en defensa dejó el mediocampo muy desabastecido y el Arsenal logró pasearse por donde quiso, venciendo finalmente por un indiscutible 5-1. Era la segunda caída al hilo para los de Jokanovic, que luego encadenaron cuatro más, con la derrota de este fin de semana ante Liverpool, por 2-0.

¿Habrá luz al final del camino?

Claudio Ranieri fue elegido como reemplazo de Jokanovic | Foto: Premier League
Claudio Ranieri fue elegido como reemplazo de Jokanovic | Foto: Premier League

Es difícil encontrar una solución en el corto plazo, y es apático que una de las soluciones haya sido la ida de Slavisa Jokanovic, pero lo cierto es que el serbio no ha logrado encontrarle la vuelta al equipo, sea en estilo ofensivo o defensivo, con mayor o menor posesión. Los nombres están, tal vez no sean los netamente indicados para este momento tan difícil del club, pero con un cambio de mentalidad a tiempo puede ser el giro de timón necesario para enderezar el rumbo del barco, un crucero que se ilusionaba con llegar a buen puerto, pero que por ahora está naufragando en aguas turbulentas. ¿Será Claudio Ranieri el capitán indicado para esta premisa? Sólo el tiempo lo dirá.