Sorpresa inicial en el Red Bull Arena

El conjunto canadiense de Toronto logró llevarse los tres puntos de uno de los estadios más difíciles de la competición, al ganar a los New York Red Bulls. Los visitantes fueron muy inferiores durante todo el encuentro, pero dos genialidades del italiano Giovinco, le dieron los tres puntos y permitió al jugador estrenar su casillero de goles.

Sorpresa inicial en el Red Bull Arena
Giovinco sigue marcando las diferencias || Imagen; torontofc.ca
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Por Manuel Vaquero Rodríguez

El partido que daba el pistoletazo de salida a esta MLS 2016 dejó con mal sabor de boca al conjunto local, que después de dominar el encuentro de principio a fin, perdió los tres puntos por un error fatal. Los canadienses no lograron encontrarse cómodos en ningún período del partido y sólo al final, en dos contras, lograron llevarse el partido.

Dominio taurino

El encuentro imtuvo un inicio muy esperado en el que el respeto de ambos equipos hacia el rival marcó los primeros minutos. Conocedores del potencial ofensivo del contrario, trataron en este inicio de no cometer errores defensivos.

Pese a ello, con el paso de los minutos se comenzó a ver el planteamiento de ambos equipos, bastante diferentes el uno del otro. El New York Red Bulls buscaba un juego más elaborado, tratando de tener la posesión del balón y tratando de llegar al área rival con el balón controlado. Los canadienses sin embargo, permanecían bien posicionados en defensa y con transiciones defensa-ataque veloces o desplazamientos en largo, trataban de sorprender a la adelantada defensa rival.

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Esto significó que los ‘taurinos’ fueran haciéndose los dominadores del encuentro, aunque las acciones peligrosas tardaron en llegar. Fue cerca del minuto 20 cuando Zubar remató un saque de esquina por encima del larguero. A partir de ese momento las ocasiones comenzaron a multiplicarse para ellos, pese a que los disparos no acababan llegando entre los tres palos.

A medida que el partido se acercaba al final de la primera parte, los canadienses comenzaron a tener llegadas sobre la meta defendida por Luis Robles. La más peligrosa fue un disparo desde el centro del campo del italiano Giovinco, que después de dos sombreros, vio adelantado al portero y trató de superarlo, pero este logro atajar el balón.

Pero el marcador no se movió y el colegiado señaló el camino a los vestuarios, con un equipo local que se había erigido como claro dominador, aunque no consiguieron contar con un disparo claro sobre los tres palos.

Giovinco arranca la moto

El inicio de la segunda mitad fue bastante disputado, con unos Toronto FC volcados al ataque, tratando de sorprender en los primeros minutos. Esto beneficiaba al juego de los locales ya que lograban aprovechar muchos de los espacios que se creaban en la defensa rival.

Aunque poco a poco, los neoyorkinos volvieron hacerse dueños del balón, obligando a su rival a tener que mantener a sus líneas defensivas a escasos metros del área. Esto no beneficiaba al juego de ninguno de los dos conjuntos ya que los locales no conseguían encontrar espacios en al defensa rival y los canadienses se situaban muy lejos de la portería contraria.

Pasada la hora de partido, los Red Bulls desaprovecharon la ocasión más clara del partido hasta el momento. McCarty filtró un balón entre los defensas que dejó a Wright-Phillips solo frente al portero, pero el delantero inglés no logró definir con éxito y el disparo se marchó al lateral de la red.

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El conjunto neoyorkino tenía a su rival cada vez mas encerrado a medida de que los minutos pasaban, pero las ocasiones de no estaban siendo del todo exitosas. Pero cuando peor lo estaban pasando los visitantes, llegó la ocasión más peligrosa para los canadienses. Un disparo de Endoh que Robles tuvo que despejar, pero el balón llegó a Giovinco, que volvió a disparar a puerta, pero con tan mala suerte que el esférico golpeó en el palo.

Pese a los cambios ofensivos y el dominio del balón, los ‘taurinos’ seguían sin materializar las ocasiones. Pero su rival, en un partido en el que apenas tuvieron llegadas, consiguió sorprender al Red Bull Arena. Un contraataque de los canadienses finalizó con un penalti al japonés Endoh, después de que el lateral Lawrence perdiera la posición y el arrollara en el momento de rematar a puerta. El encargado de transformar la pena máxima fue Giovinco, que abría si cuenta de goles en esta temporada de 2016.

A partir de ese momento el partido se rompió, y los Toronto FC con el tiempo cumplido, lograron dar por terminado el partido con una contra que ‘Marky’ Delgado  definió de manera fabulosa, dando los tres puntos a su equipo. 

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Sobre el autor
Manuel Vaquero Rodríguez
Apasionado del deporte rey. Disfruto con todo lo que tenga que ver con el fútbol, ver, escuchar, jugar, escribir. Entrenador de fútbol base, disfruto enseñando, pero más aprendiendo. Un buen entrenador es aquel que se hace así mismo, de campos de tierra a grandes estadios. Amante del fútbol internacional y poder descubrir jugadores desconocidos.