Los Toronto FC consiguieron imponerse a uno de los rivales más fuertes de la competición, Los Angeles Galaxy, en un partido en el que ninguno de los equipos hizo mucho para salir vencedor. Durante la primera mitad, los dos equipos estuvieron parejos en cuando a juego, aunque fueron los canadienses los que tuvieron acercamientos más peligrosos. La segunda parte continuó muy similar a la primera, pero un gol de Moor en los minutos finales decidió el encuentro.

Miedo a atacar

Desde el inicio se vio un partido en donde los dos equipos se disputaban el control del juego, llevando a que este se desarrollara casi en su totalidad en la zona de creación de ambos. Esto llevó a que en los primeros minutos sólo se viera un disparo lejano de Giovinco que se marchó fuera por poco y un remate que Gordon no logró realizar con éxito.

Con el paso de los minutos, la superioridad numérica de Los Angeles Galaxy en el centro del campo, hizo que llevaran la iniciativa del juego. Pero las cualidades del delantero que tenían sobre el terreno de juego les impedían encontrar profundidad en sus acciones, ya que este realizaba muy pocos desmarques.

Hamilton trata de deshacerse de Van Damme (Imagen: usatoday.com)

Sin embargo, el juego de los canadienses era bastante claro. Con una transición entre defensa y ataque muy veloz, sorprendían en muchas ocasiones a los defensas californianos, lo que les permitió realizar varios disparos contra la meta defendida por Rowe, pero apenas le crearon peligro.

Con el final de la primera mitad llegando, los dos equipos volvieron a igualar fuerzas en el centro del campo, lo que mantuvo el juego muy alejado de las áreas. Esta situación tan pareja provocó que se llegara al descanso con el mismo marcador con el que comenzó el partido y con bastante trabajo para ambos entrenadores, si querían ser el equipo que se llevara finalmente los tres puntos.

Sin argumentos y sin juego

La segunda mitad no varió mucho a la anterior desde su inicio, ya que ninguno de los dos equipos dio su brazo a torcer y el balón continuó disputándose en la zona de creación de ambos.

Aunque poco a poco, el equipo de los Toronto FC comenzó a encontrar espacios en la defensa de su rival, lo que le permitió a Giovinco tener dos ocasiones muy claras de adelantar a su equipo, pero el portero estuvo muy atento para detenerlas.

Cuando el partido había superado el ecuador de la segunda parte, los dos entrenadores comenzaron a realizar el carrusel de sustituciones, buscando un cambio par parte de sus equipos. El más significativo fue el de los canadienses, ya que quitaron a un jugador de ataque para dar entrada a un mediocentro (Will Johnson), con clara intención de mantener al equipo bien posicionados y dando, aparentemente por bueno, este resultado.

Celebración del gol de Moor (Imagen: usatoday.com)

Con el partido dentro de los últimos 15 minutos, llegó la jugada que decantaría el mismo para los locales. En una segunda jugada de un saque de falta de los canadienses, Cheyrou prolongó el balón en el primer palo para que Moor apareciera en el segundo y rematara de cabeza e introdujera el balón en el fondo de la red.

A partir de ese momento, el equipo californiano asedió el área rival, pero apenas consiguió realizar un disparo a puerta. Esto significó que el partido finalizara con la victoria local ante un rival que apenas interpuso oposición.