Alex llegó al Espanyol a finales de agosto de la temporada pasada. Por aquel entonces, el equipo ya había jugado dos partidos de liga y peleaba por un puesto en la parte alta de la tabla. A pesar de jugar pocos minutos, el joven mediocampista se supo ganar el cariño de la afición, y Álex quiere que este sea su año.

El futbolista madrileño considera que el anterior “fue un año de adaptación”. Es consciente que llegaba de jugar en segunda división y que es un jugador joven, pero asegura que “este año ya es hora de ser un hombre y dar un paso adelante”.

Las ganas y la ambición que tiene Álex en su primera pretemporada como blanquiazul son las mismas que las del resto del equipo. El mediocentro dice que ve al equipo “con ganas y con ilusión, igual que como está el míster”.

Precisamente de Sergio González también ha hablado Álex, quien valora de forma positiva que en sus entrenamientos de pretemporada el balón tenga un papel más protagonista: “Sergio quiere hacer un juego equilibrado y vistoso. Es mejor para mí, para mi fútbol y creo que puede sacar mi mejor rendimiento”.

Una de los sistemas a los que Sergio puede recurrir esta temporada es el 4-4-2, una formación con la que el futbolista madrileño se siente muy cómodo: “Cuando fiché por el Espanyol vine como mediocentro. Con Aguirre también me gustaba la posición en la que jugaba pero mi demarcación natural es la de pivote”. Siempre a disposición del técnico, Álex ha dicho que “si el míster requiere que sea más defensivo o un poco más estático no es problema para mí”.