El entrenador del Espanyol, Sergio González, se presentó cabizbajo ante los medios tras perder 5 a 1 en el derbi catalán: "Estoy muy triste por el resultado, por los cinco goles. Primero, por los jugadores y, luego, por la afición. Un 5-1 te deja con pocas excusas. En la primera parte, fuimos iguales o mejores que ellos, nos pudimos ir al descanso 0-2, pero llegamos fastidiados al descanso y no supe inculcarles cómo sobreponernos. Salimos bien vendidos, a partir del tercer gol no hubo partido". 

Al ser preguntado por las conclusiones que saca del partido dijo que, "en la primera el equipo se dejó la piel, defendiendo, saliendo bien por banda, con ocasiones... En la segunda las conclusiones son muy pocas. No supe mentalizar al equipo tras el empate".

"El primer gol de Messi nos hizo mucho daño y yo no supe cómo decirle a los jugadores que se olvidaran de ese gol, que se podía salir de ahí", añadió. 

Siguiendo con la charla del descanso, el míster perico concluyó diciendo que, "si hubiera sabido que hice bien, lo habría hecho". "La charla fue normal, les dije que se olvidaran del gol; en la primera parte, el equipo no se merecía para nada ese tanto en contra", continuó. 

Sergio destacó que la clave del partido fue Messi:"Sabemos todos lo que es y lo que supone. Va a ser una leyenda del fútbol y para el Barça es un lujo contar con un futbolista como él".

Por último, el técnico espanyolista de cara a los próximos encuentros que, "analizar lo que no has hecho bien y dar un paso adelante, el equipo tiene capacidad para sacar esto adelante sobre todo fuera de casa, en casa estamos demostrando que rendimos a un nivel alto, el fin de semana que viene tenemos una revancha e iremos a por ella".