El Girona desea volver a armar un equipo competitivo y de garantías para volver a pelear por el sueño de ascenso a Primera División del cual se quedó a tocar esta anterior campaña. Para ello manejan varios nombres de jugadores a contratar , en los que destacan dos de ellos: Mamadou Sylla y Pol Llonch, futbolistas del Espanyol B. Ambos jugadores son objeto de deseo del director deportivo de la entidad gerundense, Quique Cárcel, según explica Diari de Girona.

La buena relación entre Espanyol y Girona, clave

Por lo que se apunta en el medio, el director deportivo del club rojiblanco lleva tiempo contactando con el agente de Mamadou, a quien le ha comunicado en más de una ocasión su deseo de contar con sus servicios para la próxima temporada. La operación, no obstante, se presenta bastante complicada ya que existe interés también por la contratación del delantero blanquiazul por parte de más de un equipo de la Liga Adelante también, de la misma forma que también por parte de equipos del extranjero. Sin embargo, la buena relación entre Espanyol y Girona sería clave para que finalmente se produjera el desembarco de Mamadou al conjunto de Montilivi.

El ariete periquito, con tan sólo 21 años, cuenta ya con experiencia en la categoría de plata del fútbol español –jugó el tramo pasado de la anterior temporada en las filas del Real Racing Club– y aunque luchará esta temporada por hacerse con un hueco en el primer equipo del Espanyol, con el que se encuentra concentrado actualmente en Garòs en el stage de pretemporada, no descarta la opción de salir cedido si finalmente no consigue hacerse con un puesto en el equipo que dirige Sergio González.

Pol Llonch y Quique Cárcel tienen el mismo representante

El otro jugador perico en la agenda de Quique Cárcel es Pol Llonch, mediocentro del filial blanquiazul. El ex del Hospitalet, consciente de que tiene difícil su participación con el primer equipo esta temporada, se plantearía una cesión y aunque por el momento no hay una propuesta oficial por parte del Girona, el interés por parte de la entidad gerundense por el joven centrocampista del Espanyol B, es una realidad. Al jugador lo representa Pau Clavero, el mismo agente de representación de Quique Cárcel y el intermediario externo en las negociaciones de compra por parte de la empresa francesa TVSE Fútbol del 80 por ciento de las acciones del Girona.