Hasta cinco jugadores de la cantera pasarán a formar parte del primer equipo esta temporada. Los elegidos por Sergio González son Duarte, Jordán, Caballé, Raillo y Rober. Durante estos días han cumplido su primer stage de pretemporada en la Vall d’Aran para quedarse. Todos esperan con tener minutos y todos están dispuestos a darlo todo para continuar en la línea que les ha permitido dar el salto a la primera división.
Se da la paradoja de que el más veterano es el más joven de todos. Duarte, con tan solo 19 años debutó la pasada campaña en la Copa y poco a poco empezó a ganarse la posición en el once liguero. Este año viene para consolidarse. Durante estos días de pretemporada reconoció que tenía muchas ganas de “ayudar al equipo y de afrontar un rol importante”. Sus actuaciones les valieron jugar dos partidos con la selección sub-21 y también una convocatoria con la selección absoluta, algo que calificó “como un sueño”.
Otro que también ha pisado césped de primera división es Joan Jordán. Con 21 años llegó a disputar unos minutos en el Bernabéu, aunque no tuvo la misma continuidad que su compañero Duarte. Para él fue una temporada de contrastes, de primera a segunda B. Tras saber que este año estaría ya solo con la primera plantilla dijo que “es un punto a favor”.
Caballé, ahora con 24 años, hubiera sido el primero de los cinco en debutar en la élite del fútbol si no hubiera sido por una lesión. Llegó a pensar que “no podría dar el salto” por culpa de este percance. A pesar de la espera, finalmente este año recibió la noticia que tanto esperaba, algo que también supone “una ilusión máxima”.
Raillo y Rober cierran este selecto club de canteranos. Raillo suma 23 tacos y ahora mismo se perfila como el tercer central del equipo. Él mismo es consciente de ello, por lo que está seguro que gozará “de una oportunidad para jugar”. Rober, de 22, cubrirá el carril derecho por detrás de Arbilla y Javi López. En palabras del mismo jugador, cumple “el sueño de todo canterano del Espanyol”. Da la casualidad que Rober fichó en 2013 por el Rayo, donde coincidió con el mismo Anaitz. De él opina que “es un gran futbolista con un toque de pelota magnífico”. Arbilla será maestro pero también competencia. Rober ya dijo que intentaría “aprender de él”, pero si puede “ponérselo difícil”.