La Liga no ha podido empezar mejor para el Espanyol B. El partido contra el Lleida fue feo, sin grandes detalles futbolísticos pero los puntos se quedaron en casa contra todo pronóstico. Lluís Planagumà, entrenador del filial periquito, ha comentado después del partido que el resultado es para estar "muy satisfecho, no sólo por el resultado sino también por su desarrollo".
El técnico catalán ha admitido que el filial tiene "un equipo nuevo e inexperto" y que uno de los aspectos más importantes es "adaptarse a la Segunda B". "Para nosotros era un partido muy complicado y creo que supimos trabajarlo y llevarnos el premio que es muy merecido", ha reconocido Planagumà.
“Nuestro trabajo es demostrar a nuestros jugadores que esto es Segunda B, que hay situaciones en la que puedes tener la posesión y hay situaciones donde no la puedes tener. Y cuando no la tienes, debes saber defender igual de bien que cuando puedes tener la posesión. Y este equilibrio es el que servirá para hacer crecer a nuestros jugadores", ha analizado el técnico catalán.
El Lleida tuvo la posesión del balón durante todo el partido mientras el Espanyol B defendía a la perfección con una nutrida defensa. La segunda parte de los ilerdenses no fue nada productiva ya que el Espanyol B tapó "más las diagonales con dos mediocentros más fijos" y dio entrada a "un segundo punta para que intentara ganar las segundas jugadas".
El único gol del partido surgió de una contra muy bien realizada: "Enlazamos varias jugadas de contraataque que, de haber estado más acertados, nos hubiesen permitido lograr un resultado más amplio”. "Nosotros somos un equipo inexperto y necesitamos que los jugadores conozcan la realidad de la competición y se adapten", concluyó el preparador periquito.