Pablo Machín compareció este viernes para valorar el choque de los suyos ante el Mirandés, otra final para el equipo gerundense, y con la ambición por bandera. “Lo fundamental es ganar y levantar la cabeza para volver a ganar”, decía convencido Machín. Ahora sólo falta que se lo crean los jugadores, los principales protagonistas. “La imagen es buena, estamos haciendo buenas cosas y los merecimientos son mayores a los puntos”. Sin embargo, el míster cree que “llevan un déficit de cinco puntos” -tres del día del Murcia y dos el pasado domingo ante el Hércules-.
Machín resumía las sensaciones tras el partido en Alicante, en el que el equipo hizo una segunda parte para enmarcar. “Al llegar al vestuario, la sensación era de derrota. Eso me gusta, porque significa que el equipo es ambicioso, demostró que allí fuimos a por la victoria, y lo intentamos hasta el último suspiro, pero no pudo ser”, explicaba el técnico numantino. Según él, “ése es el camino, potenciar lo que se hizo bien, es decir, generar muchas ocasiones de gol para que el porcentaje de efectividad aumente e intentar minimizar las ocasiones que cree el rival”.
Para lograr el objetivo, declara el técnico, no queda otra que mirarse a uno mismo, dándole una importancia relativa al rival que haya delante. “Nosotros tenemos que ser los que llevemos la iniciativa. El objetivo del Mirandés es muy ambicioso -entrar en playoff y subir a Primera División-, por lo que vendrán con el convencimiento de que, para conseguirlo, tendrán que ganar en el campo del penúltimo clasificado”, aseveró el ex del Numancia. “Nosotros podemos ganar a cualquiera, como hemos demostrado, y el Mirandés puede hincar la rodilla”, si bien es cierto que, recordó Machín, los mirandesistas “han hecho bien su trabajo y están más cerca del playoff que del descenso”, cosa que el Girona no ha hecho.
Una buena racha y un buen rival
El Mirandés es el undécimo clasificado con 44 puntos. Si retrocediéramos un mes atrás, veríamos a este equipo luchando en la parte baja con el Girona, pero una gran racha lo ha aupado a las posiciones tranquilas. Pablo Machín dijo días atrás que, pasara lo que pasara, para él el Mirandés era un rival directo. El soriano es fiel a su discurso: “Para mí es directo porque es el rival inmediato que tenemos, aunque me sorprenden los resultados que ha tenido últimamente. De los últimos cuatro partidos ha ganado tres, aunque no creo que se diferencie mucho en cuanto a calidad de la que tenemos nosotros”, reconocía el técnico.
Además, elogió la forma que tienen de jugar los burgaleses. “Son un bloque, defienden todos y es complicado generarles ocasiones”, afirmó Machín. Además de una buena defensa, tienen hombres con el olfato goleador muy desarrollado. “Si tienen frescura arriba, con hombres como Díaz de Cerio y Goiria, el gol lo tienen garantizado”. Otro nombre propio al que se refirió el técnico del Girona es Pablo Infante, que vive una segunda juventud. “Ahora mismo tienen a Pablo Infante, que está en un magnífico estado de forma. Arriesgan en general muy poco, proponen lo justo e intentan aprovecharse de los errores del rival y de las virtudes que tienen. Han hecho bastantes goles a pelota parada y tienen llegadores de segunda línea”, explicó Machín, al mismo tiempo que dijo que espera que el partido “sea parecido al del Alcorcón, porque significará que han sido superiores al rival y que han ganado el partido”.
Sólo dos bajas
El capítulo de bajas para el encuentro ante el Mirandés pasa por los nombres ya conocidos de Felipe Sanchón y David Garcia, ambos lesionados. A ellos dos deberán sumarse los descartados una vez que el técnico elabore la convocatoria este sábado. Pablo Machín hablaba así de estas circunstancias: “Felipe y David Garcia son las únicas bajas, mientras que el resto están a disposición y van mejorando poco a poco”. Al decir esto, se le preguntó si se refería a los delanteros Tato y Chando, a lo que contestó que “tanto Tato como Chando han tenido problemas -el segundo tenía problemas estomacales-, pero irán cogiendo ritmo poco a poco”.
Por lo que respecta a las dos bajas ya comentadas, de Felipe Sanchón, dijo Machín lo siguiente: “Sólo cuento en los que tengo en el día a día. De vez en cuando he visto a Felipe en el campo, en el vestuario demuestra que tiene ganas de colaborar, pero mientras que no entrene con el grupo, me olvido de él”. Y en cuanto a David Garcia, es más optimista: “Quizás al final de la semana que viene ya podrá entrar en la dinámica del grupo”, afirmó.