El técnico amarillo, Sergio Lobera, volvía a ver cómo su equipo perdía, una vez más en casa. Son ya cuatro las jornadas consecutivas en la que Las Palmas mete menos goles que su rival (tres en liga y una en copa). A su vez, Lobera reiteraba que siempre se puede hacer mucho más y que el equipo viene en una dinámica negativa. No obstante, señalaba el partido de hoy como el ejemplo de esa dinámica en la que está inmerso su equipo.
Al ser cuestionado por parte de la grada, llegando incluso a mostrarse en la Grada Sur una pañolada blanca, Lobera afirmaba que no se sentía más nervioso que otros días. Reiterando que el equipo no se le ha escapado de las manos, hizo hincapié en que ha sacado a su barco de peores naufragios -temporada pasada ante el Racing, donde Las Palmas retomó la senda de las victorias- y en que tiene que mejorar mucho para cambiar los pitos de la grada. Es por ello que el entrenador aragonés reiteraba que se siente capacitado para darle la vuelta a esta situación.
En cuanto al transcurrir del partido, ha admitido que a su conjunto no le ha salido nada y que los jugadores han salido mermados al finalizar el choque. Y es que cuando Las Palmas estaba empezando a carburar y a crear peligro con llegadas de Chrisantus y buenas combinaciones entre Valerón, Nauzet y Masoud, llegó el gol del filial blanco. El `míster' se sentía resignado y dejaba entrever que Las Palmas está teniendo mala suerte al hacer hincapié en el gol que anotaba Aythami Artiles en su propia portería y en las ocasiones que no materializaron.
"La semana que viene tenemos otra oportunidad", declaraba el entrenador de la UD mientras decía que iba a seguir trabajando para cambiar la dinámica. El miércoles disputarán los amarillos la vuelta de la Copa del Rey en Los Juegos del Mediterráneo ante el Almería y reconocía que es una buena semana para jugar fuera.
No obstante, Lobera se afirmaba sentirse el máximo responsable de la situación en la que está naufragando el conjunto grancanario. En cuanto a mandar un mensaje esperanzador a la afición, el elegido para dirigir a Las Palmas, destacaba que debe trabajar mucho para que la grada vuelva a creer en el equipo. Asimismo, asumía que tiene la responsabilad, tanto en los buenos como en los malos momentos.