Marcelo Silva estaba muy contrariado al finalizar el partido. La derrota del equipo no viene nada bien en un momento en el que se empiezan a jugar cosas muy importantes. El central estaba especialmente enfadado por el penalti: “Me voy indignado por el penalti que nos pitaron. Yo no saco el brazo, me doy la vuelta y luego pita el árbitro”, afirmó.

El equipo se va con una sensación negativa del partido: “Nos vamos con el sabor amargo que podíamos haber sacado los 3 puntos. Era fundamental lograr los tres puntos y no se pudo”. Además, negó que el equipo esté en crisis: “Yo no diría que estamos en una pequeña crisis, simplemente es que la Segunda División es muy complicada”.

La derrota deja al equipo en una situación de mucha igualdad en el liderato de la liga: “Se está apretando porque todo el mundo está ganando, cada vez es más difícil. Tenemos que intentar no venirnos a bajo y revertir esta derrota con una victoria la semana que viene”.

Sobre la jugada del penalti que logro parar Casto, afirmó que la defensa debería haber estado más atenta: “Deberíamos haber estado más atentos al rechace. A partir de ahora lo importante es ganar los partidos, no importa cómo”.