Abuso de autoridad del Athletic frente a un desbordado Málaga

Aritz Aduriz lidera al Athletic con dos goles en la plácida victoria frente a un Málaga que no inquietó ni dio sensación de peligro durante ningún momento del partido. Dos tantos al principio de cada mitad minan la actitud de los de Schuster que se vieron superados en todo por un equipo que sabe a lo que juega y que lo plasma a la perfección sobre el césped. Sublimes Erik Morán, Muniaín, Susaeta e Iturraspe. En los visitantes, Amrabat -de nuevo- y Juanmi fueron lo más rescatable.

Abuso de autoridad del Athletic frente a un desbordado Málaga
Foto: Ricardo Larreina - UGS Vision.
albertoardila
Por Alberto Ardila

Hoy Bilbao ha sido testigo de gala del típico partido en el que un equipo muy necesitado de sus objetivos, competición europea, avasalla a otro, no tan urgido, con un fútbol imperial y una actitud encomiable que fue premiada con una victoria que sabe a gloria para los rojiblancos. El Málaga no fue rival en ningún momento para el Athletic.

Los costasoleños fueron atropellados por el conjunto vasco durante los primeros cuarenta y cinco minutos, víctimas del ritmo altísimo que impusieron los de Valverde, con una intensidad desmesurada, en la tónica general de los encuentros que los 'leones' juegan como locales. Lo cierto es que el Málaga no olió la bola.

Aduriz dio un máster de delantero centro en noventa minutos

Cuatro minutos tardó Aritz Aduriz en poner el primer gol en el luminoso tras un saque de esquina botado por Markel Susaeta. Angeleri era el hombre encargado de cubrir al ariete vasco, pero en el área pequeña se impuso más la pillería de éste que las tablas del argentino, que, como de costumbre, estuvo algo lento y desafortunado en el marcaje. Decimocuarto gol de la temporada para el exjugador del Valencia, que está cuajando una segunda vuelta soberbia, y otro con un testarazo imparable.

Las bajas obligaron a Schuster a reubicar a un Eliseu bastante fuera de forma en el lateral diestro, a pierna cambiada. Muniain supo leer a la perfección las limitaciones del portugués por ese costado y le desafió cada vez que tuvo ocasión, buscándole las cosquillas y provocando algún rifi rafe entre ambos. Sufrio mucho el defensor del Málaga con la velocidad del 'Bart Simpson' del Athletic.

El equipo andaluz veía atónito pasar el tiempo, sin ser capaces de generar durante todo el primer acto una sola ocasión de peligro sobre la meta defendida por Iraizoz. Solo Amrabat intentó algo distinto. Ni Pérez ni Juanmi supieron encontrar a Roque ni al marroquí. Mientras tanto, Darder y Camacho estaban sobrepasados por la intensidad que le pusieron al partido Iturraspe, Ander y Erik Morán, que sustituía al lesionado Mikel Rico y que dejó muy buen sabor de boca. En Bilbao nadie se acuerda ya de Beñat, cuyas discretas actuaciones le han relegado al ostracismo.

Viendo la inoperancia ofensiva y sufrimiento del Málaga, parece que la noticia más positiva para sus intereses era que el Athletic no había podido materializar sus ocasiones y que el 1-0 aún les dejaba algo de esperanza y aliento para el segundo tiempo. 

Por la vía rápida

Poco tardaron los locales en volver a zarandear al Málaga. Pasaba un minuto del arranque del segundo tiempo cuando una pérdida de balón de los andaluces en medio campo posibilitó el contraataaque del Athletic, llevado entre Ander Herrera y Susaeta, que cedió para que Aduriz marcase el segundo a placer. Otra vez los de Schuster veían cómo encajaban un gol tempranero. El show de Aduriz estuvo a punto de ser mayúsculo y épico si llega a anotar un gol tras una volea con la zurda sin dejarla caer que repelió Willy, que hoy no pudo hacer las veces de santo.

Justo antes del gol, Iakovenko había sustituido a un Pérez desquiciado, llevando a Juanmi al lugar donde mejor rinde, la mediapunta. El canterano de La Academia y Amrabat intentaron animar levemente a un Málaga que tras encajar el segundo se vino tímidamente arriba. Fue de las botas del extremo marroquí de las que nació la única acción de peligro de los malaguistas en todo el partido, pero Darder no acertó a afinar la dirección de su cabezazo con todo a favor.

El Athletic no lo dudó y siguió a lo suyo, intimidando y atemorizando al Málaga con esa velocidad y esa intensidad que acaba por encerrar en su área a todos los equipos que visitan San Mamés. Así nació en el minuto 61 la acción que motivó el tercer gol de los bilbaínos y la sentencia. Córner botado por Susaeta, rechazo a la frontal y disparo de Ander, que pasaba por allí, y que Willy tocó pero no acertó a despejar. Jarro de agua congelada para el Málaga que ya sí que sí, tiró la toalla y se dedicó a ser un mero espectador más de la clase de fútbol que estaban impartiendo los del 'Txingurri' Valverde.

Schuster optó por descargar de minutos a Amrabat y Roque y los retiró del campo en detrimento de Rescaldani y Portillo a quince minutos del final. Minutos que sirvieron para que Eliseu siguiera sufriendo lo indecible por banda diestra y para que San Mamés disfrutara del gran partido que le brindó su equipo, que cada vez está más cerca de hacer realidad que el himno de la Champions League suene por todos sus rincones. El Málaga deberá seguir esperando otro partido más para cerrar su salvación virtual; ante el Villarreal, otra reválida. Aún queda tela por cortar para ambos.