Se acerca un clásico del fútbol andaluz entre dos clubes históricos con dos grandes aficiones. El Sánchez-Pizjuán albergará el encuentro entre el Sevilla FC y el Málaga CF, dos equipos que han demostrado siempre una gran rivalidad en el terreno de juego.
Esta rivalidad se ha reflejado también en las gradas, donde los aficionados han animado hasta la saciedad a sus equipos y han puesto entredicho alguna vez el nombre del rival con distintos cánticos. Por ello, la Comisión Estatal contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte ha declarado este partido de alto riesgo, ya que los precedentes así lo confirman.
Ya sucedió la pasada temporada, donde la visita del Sevilla a la Costa del Sol dio mucho de que hablar. La Liga envió un escrito a la Comisión de la Competición Profesional por una serie de cánticos y expresiones contra los rivales en las gradas de La Rosaleda, algo que no se debe tolerar en ninguna afición.
Esto es algo que se quiere evitar, pero no por ello la relación entre ambos clubes es más fría. El club sevillista ha puesto 800 entradas a 30 euros para aquellos aficionados blanquiazules que quieran acercarse a la capital andaluza para ver a su equipo. Esto se añade al buen horario (16:00 horas) en el que se celebrará tal encuentro el sábado, por lo que es una gran iniciativa para recibir a los aficionados boquerones en las gradas.
Sin duda, este será un gran partido, donde ambos equipos llegan en una buena situación y si a esto se le añade el gran ambiente que habrá en las gradas del Sánchez-Pizjuán, el primer partido de la jornada 20 de la Liga BBVA se espera apasionante, siempre y cuando haya respeto tanto en el terreno de juego como en el graderío.