El cuadro entrenado por Javi Gracia se desplazaba al Estadio Nuevo Los Cármenes para enfrentarse a un Granada inmerso en la lucha por la permanencia. Los objetivos eran claros, el Málaga quería 42 puntos que aseguran la permanencia, mientras que el cuadro nazarí necesitaba sumar para dejar atrás la zona de descenso a la Liga Adelante.
El partido comenzó con un Málaga bastante arriba, intentando hacer daño. En el primer minuto de juego, un buen remate de Camacho estuvo cerca de convertirse en el primero del encuentro, pero una gran parada de Andrés Fernández lo impidió. Los malagueños no querían perder la energía de los primeros minutos. Cop tuvo la oportunidad de estrenar el marcador en el minuto tres, pero nuevamente Andrés Fernández detuvo el cabezazo del jugador visitante.
Andrés pareció animar a su equipo con sus dos grandes paradas, consiguiendo que fuese el Granada quien respondiese a las primeras acometidas visitantes. En primer lugar El Arabi con un disparo raso que se marchó cerca del palo de la meta defendida por Ochoa, para posteriormente Success filtrar un buen centro que no encontraría rematador.
El Granada se venía cada vez más arriba, mientras que el Málaga encontraba en el contraataque su mejor arma. En el minuto 22, Cop fallaría una de las ocasiones más claras del encuentro después de una gran jugada personal de Recio por banda. Poco más de diez minutos pasaron antes de ver otra clara ocasión. Esta vez fue Success quien no encontró puerta cuando solo tenía a Ochoa delante de él.
Poco más ocurrió en una primera parte sin demasiada intensidad aunque sí con ocasiones claras para ambos conjuntos. Misma tónica que en el inicio de la segunda parte, donde el respeto entre los dos equipos se palpaba a pie de césped.
Tanto Málaga como Granada tenían ocasiones, aunque no con demasiado peligro para las metas de sus cancerberos. Únicamente, Success consiguió que la grada gritase "huy" en un claro mano a mano ante Ochoa que tuvo el mismo final que el protagonizado en la primera mitad.
En los últimos diez minutos de partido se apreció cierto nervisiosismo por parte del conjunto granadino, el cual necesitaba como fuese los tres puntos. En los últimos saques de esquina Andrés Fernández llegó inclusive a subir para ser una opción más al remate.
Poca salsa para un partido que prometía. Un derbi andaluz en el que pesó más las necesidades que el fútbol, y el cual deja al Málaga provisionamente octavo, mientras que manda al Granada Club de Fútbol a la 17ª posición, ambos con un partido más que el resto de sus rivales.