Desde su llegada al Real Zaragoza, Pape Maly Diamanka todavía no había contado con una oportunidad de demostrar su valía. Con la sanción de Wilk tras su expulsión ante Osasuna y con la necesidad de dar un cambio en el centro del campo, Popovic dio entrada al senegalés en el once titular zaragocista que se enfrentó al CD Lugo. 

En estas últimas jornadas, el centro del campo ha sido uno de los puntos débiles del equipo en el que la falta de creatividad provocaba un gran caos a la hora de circular el balón por el terreno de juego. Por ello, Ranko Popovic se ha visto obligado a hacer algún cambio que de con la posible solución al problema. 

Una opción válida para el centro del campo

Ante el CD Lugo, Popovic introdujo dos cambios fundamentales en el centro del campo. Erik Morán y Diamanka entraban en el once titular en sustitución de Wilk y Aria, respectivamente. Morán que ya ha contado con minutos durante algunos partidos de esta temporada, partía como titular acompañando a Dorca en el centro. 

Quién sí se  estrenaba por primera vez en el once era Diamanka. El senegalés a pesar de haber llegado a la entidad aragonesa con una muy buena carta de presentación de lo que fue su anterior temporada en el CD Leganés, Popovic todavía no le había dado la oportunidad de demostrar su valía. Aunque en pretemporada el técnico serbio jugó con su posición y le pudimos ver desempeñando diferentes papeles en el centro del campo, ante el Lugo pudimos verle en su posición natural. 

Mientras Dorca y Erik Morán se encargaban de dar equilibrio al centro del campo, el senegalés pudo aportar esa velocidad necesaria para hacer llegar balones a los hombres de arriba. El jugador pudo moverse con plena libertad y hasta en ciertos momentos ocupó la posición de nueve llegando al área rival y contando con alguna ocasión de gol. 

¿Un cambio definitivo?

Con la introducción de Diamanka en el once se pudo ver a un Real Zaragoza más creativo y potente de cara al ataque, aunque  en la segunda parte decayera el ritmo y el juego del equipo. Aunque no es un jugador ordenado en lo táctico, Diamanka tiene potencia y movilidad para aportar ese algo que tanto le hace falta al Real Zaragoza. Pese a que el equipo no consiguió los tres puntos, sí en algunos instantes dio una imagen de mejora. Este hecho podría plantear a Popovic dudas a la hora de quién alinear el próximo partido ante el Deportivo Alavés, partido que el conjunto aragonés debe ganar a toda costa para calmar los ánimos en la afición. 

Así pues ante esa pequeña mejora, Popovic podría presentar la misma alineación vista ante el CD Lugo y que, hasta el final de la primera parte, dio resultado. Con Morán y Diamanka hay una mayor conducción de balón y visión de juego y esto favorecería a los hombres más adelantados que necesitan cuanto antes acabar con esa crisis de gol por la que atraviesa el conjunto aragonés.