El Real Zaragoza consiguió la victoria en el partido de ayer en La Romareda frente al filial del Athletic de Bilbao por 2-0. Lanzarote en la primera parte y Diamanka en la segunda, fueron los goleadores blanquillos en una tarde que sirve para sumar tres puntos más. Los colistas de la clasificación merecieron más, pero la veteranía de los maños pudo con los cachorros de Bilbao. Sin embargo, el buen juego de los aragoneses brilló por su ausencia en muchos tramos del partido. Momentos que aprovechó el Bilbao para atacar e intentar hacer daño a los locales, pero no obtuvieron el premio.
Morán continúa siendo un jugador fundamental en el esquema de Carreras. El vasco compone la columna vertebral del equipo y su aportación tanto en defensa como en ataque es clave en cada partido. Ayer el Zaragoza no jugó su mejor encuentro pero consiguió la victoria, que en este tramo final de Liga, es lo más importante: "Creo que no hemos jugado mal, hemos estado bien pero el Bilbao Athletic es un equipo que juega muy bien al fútbol y nos ha puesto las cosas difíciles. Al principio de la segunda parte hemos tenido problemas pero luego se han solventado bien. Ellos iban perdiendo y querían atacar".
El futbolista blanquillo jugó la segunda parte acompañado de Javi Ros en el pivote para que Diamanka jugara más adelantado. Desafortunadamente, este cambio coincidió con los peores minutos del Zaragoza; no obstante, Morán afirmó que no cree que haber retrasado a Ros fuera el causante del problema porque se entienden bien. El Zaragoza no depende de sí mismo para meterse en puestos de ascenso directo, aunque los maños están a solo tres puntos del Alavés que es segundo: "Nosotros tenemos que sacar nuestros puntos y luego mirar lo que hacen los demás. La Romareda tiene que ser nuestra en los partidos que quedan y fuera tenemos que rascar puntos también".
El siguiente partido se disputará el próximo sábado en el Estadio de Los Pajaritos para enfrentarse al Numancia. La afición zaragocista es muy importante para su equipo y como ya ha demostrado, siempre acompaña en los desplazamientos. En especial, Soria siempre es un destino que gusta a la grada blanquilla por la hermandad entre aficiones y la cercanía respecto a la capital del Ebro. "Vayamos donde vayamos la afición siempre está y aunque jugamos fuera, siempre nos sentimos como en casa", afirmó Erik Morán.