Un partido vibrante en el que los locales hicieron mayores méritos para conseguir los tres puntos, pero entre las decisiones arbitrales y la maña defensa, hizo que este finalizara con el abultado marcador de 4-4. La primera parte comenzó muy intensa, disminuyendo esta con el paso de los minutos. La segunda mitad fue muy disputada ya que ambos equipos tuvieron el control sobre el juego, Houston consiguió una amplia ventaja pero Sporting Kansas City le igualó el marcador en dos ocasiones.
Comienzo vertiginoso
El partido tuvo un comienzo vertiginoso con un par de llegadas para cada equipo en los primeros instantes, hasta que en el minuto 2, Sporting Kansas City golpeó primero. Nemeth recuperó un balón en el centro del campo, y comenzó una conducción hacia el área de Houston. Cuando llegó al borde del área, Raúl Rodríguez en lugar de tapar espacios retrocedió, dejando espacio a Nemeth suficiente para que disparara y consiguiera el primer gol para su equipo.
A pesar del gol, Sporting Kansas City siguió presionando a su rival en campo propio, y manteniendo la posesión de balón, encontraban continuos espacios entre las dos líneas de 4 jugadores de Houston, lo que provocaba situaciones de peligro. La única manera que tenían los locales de llegar a la portería contraria era con desplazamientos en largo.
En una de esas jugadas, los texanos aprovecharon un saque de banda, que tras varios rechaces de la defensa rival, el balón se le quedó suelto en la frontal a Barnes que conectó un fuerte disparo que se introdujo en la portería, haciendo imposible la estirada del meta de Kansas City.
Tras el empate de Houston el partido pasó a no tener dueño del balón, con ambos conjuntos teniendo llegadas de peligro a portería contraria. La intensidad de los primeros minutos disminuyó dando paso a un juego elaborado de los dos equipos desde la defensa. Sporting Kansas City tenía una circulación más lenta que les ayudara a buscar los espacios en la defensa. Mientras que Houston Dynamoelaboraba un ataque más vertical, sacaban el balón jugado a uno o dos toques por jugador lo que en ocasiones pillaba adelantada a la defensa rival.
Pasaban los minutos y el partido comenzó a tranquilizarse con los dos conjuntos luchando la posesión del balón, con mucho juego en el dentro del campo. Aunque no por eso las ocasiones desaparecieron y Sporting contó con un par muy claras en las botas de Dwyer, que no supo definir. Houston tuvo varias ocasiones seguidas en el lanzamiento de un par de córner, pero las buenas paradas de Luis Marín, dejó sin premio a los texanos.
Los últimos minutos de la primera parte fueron semejantes a lo ocurrido desde que Houston consiguiera el empate. Pero eran ahora los locales os que llevaban el peso del partido, disfrutando de más llegadas a la portería rival. Y sería en una de las acciones que mayor peligro había llevado durante la primera parte para Houston, los córners, donde se adelantarían en el marcador. Davis sacó el córner al primer palo en donde Bruin, anticipándose a su marcador, remató de cabeza a gol en el tiempo de descuento.
Los fallos defensivos son los protagonistas
La segunda parte comenzó de igual manera que la primera. A los 30 segundos de esta mitad, Barnes recibió un pase en el centro del campo, y sin que ningún defensa se interpusiera en su avance, condujo hasta quedarse a 5 metros de la frontal del área. Aprovechándose de la mala colocación del portero disparó a portería, consiguiendo un gol que confirmaba la remontada de su equipo.
El gol en contra levantó del letargo en el que se encontraba a los ‘Wiz’ que comenzaba a tener mayor presencia en el encuentro. Peter Vermes comenzó a realizar cambios en su equipo, sobre todo en la zona del centro del campo, para tener mayor consistencia en esta zona del campo. Dwyer seguía siendo el jugador más peligroso de su equipo en el ataque, pero no conseguía tener esa ocasión clara para marcar un gol que recortara distancias en el marcador.
Mediada la segunda parte, Houston volvía a entrar en el partido teniendo protagonismo en el centro del campo. Aprovechaba la adelantada defensa de Sporting para salir al contraataque, pero las ocasiones finalizaban con disparos lejanos o paradas de Marin. En el minuto 73, una mala cesión de Barnes a su portero, fue aprovechada por Dwyer que interceptó el pase y ante la salida de Marin, consiguió superarle y marcar gol a portería vacía.
El árbitro se inventó un penalty y una ley de la ventaja
A los 4 minutos Nemeth, de jugada individual se internaría en el área para encarar al portero de Kansas City, disparando ante la salida de este. El disparo golpeó en el pecho de Tyler que se encontraba en la línea de gol, el rechace le llegó a otro jugador de Kansas City que tampoco pudo marcar. En ese momento el árbitro concedió penalti después de conceder una ley de la ventaja (inexistente en un penalti), tras la supuesta mano de Taylor. El penalti fue transformado por Feilhaber, que ponía el empate en el marcador. En esta jugada fue expulsado Taylor por su supuesta mano.
En el minuto 82 Houston volvía adelantarse en el en encuentro tras una falta lateral sacada por Davis, en la que Raúl Rodríguez se anticipó a su marcador y definió de cabeza haciendo imposible la estirada de Marín. Pese a contar con un jugador menos, los Dynamo no perdieron la cara al partido, ni se encerraron en campo propio para defender el resultado. Siguieron buscando ese gol que les diera ventaja en el marcador en los últimos minutos.
Sin embargo los visitantes, viéndose con un jugador más, y por debajo en el marcador, buscaron el agotar todas las oportunidades posibles, para llevarse aunque fuera 1 punto del BBVA Compass Stadium. Fue entonces cuando pasaban 4 minutos del tiempo reglamentario, Zusi bajó balón a la frontal del área donde apareció Feilhaber sin oposición alguna, y de volea consiguió marcar un golazo que puso el definitivo 4-4 en el marcador.