Tras su triunfo en la primera carrera del Mundial de Superbikes en el circuito de Phillip Island, Eugene Laverty está atravesando por una situación ciertamente comprometida que para nada se asemeja a la ilusión y buenos presagios que supuso la victoria en el trazado australiano, en el que fue su estreno con su nuevo equipo, el Voltcom Crescent Suzuki. Cómo hemos cambiado que dice la canción. 

Uno de los pocos consuelos que puede hallar el piloto irlandés, es que este fin de semana llega el Gran Premio de su casa. Aunque Laverty es irlandés, su carrera doméstica siempre es en Gran Bretaña, que esta temporada volverá a ser en el trazado de Donington Park. Una pista que tampoco es que sea santo de su devoción, pero donde el pasado año logró conseguir su primer podio desde que empezó a competir en SBK. 

“El pasado año conseguí finalmente mi primer podio en Donington desde que corro el Campeonato del Mundo en 2007. Nunca ha sido un circuito fácil para mí, pero los resultados del pasado año fueron esperanzadores", comentó el piloto de Suzuki, que tiene muchas ganas de poner fin a este complicado inicio de temporada.

Un desafío complicado

Es cierto que Laverty sabía del reto que suponía venir a Suzuki, una marca venida a menos en lo que a éxitos se refiere, pero que en los últimos años está realizando un trabajo muy duro desde fábrica para tratar de poner una moto competitiva frente al resto de sus rivales, tarea para la que Laverty es un piloto con condiciones para devolver a la marca nipona a lo más alto. 

Sobre los problemas que están teniendo tanto él como su compañero de equipo Alex Lowes, algo que se pudo ver en la última carrera en Imola, Laverty se aferra al factor correr en casa: "Últimamente, hemos tenido algunas dificultades, así que sería genial cambiar el rumbo de las cosas y subir al podio delante de nuestro público".

Laverty sabe que la afición inglesa siempre apoya a sus representantes, especialmente en el Mundial de Superbikes, donde hay una nómina importante de pilotos. "Estoy deseando que llegue el fin de semana porque correr en casa siempre es especial. Los equipos británicos saben que tendremos a la afición con nosotros", asegura Laverty haciendo referencia a su estructura, el Voltcom Crescent Suzuki, cuya sede se encuentra en el país inglés.