Tom Sykes ya no es el piloto infranqueable de los sábados que le hizo ganarse el mote de Mr. Pole. El piloto británico cuenta con 25 poles en el campeonato, pero solo una esta temporada, en el último Gran Premio disputado en Assen. Esta vez no pudo repetir el trabajo de La Catedral y se conformará con arrancar segundo.

El piloto de Kawasaki marcó un registro 1:46.466 en la Superpole de Imola y se quedó a escasas 84 milésimas del registro del primer lugar de Davide Giugliano. A pesar de ello, Sykes se mostró muy competitivo y, al menos, pudo acabar por delante de su compañero de equipo Jonathan Rea, que este año se está mostrando intratable.

Sykes se mostró satisfecho con su tiempo, pero contrariado a la vez por no haber podido conseguir la pole: "Estaba relativamente feliz con mi vuelta en la Superpole, pero fue una lástima no lograrla. Sin embargo, la pole no me da 25 puntos. Nuestro objetivo era estar en primera línea y es bonito ver a Davide Giugliano regresar después de una lesión importante".

Después de lograr la segunda posición, Sykes ya está centrado en las dos carreras del domingo y espera no repetir los malos resultados de Assen, donde se quedó fuera del podio: "Fue inusual para nosotros perder ritmo después de 12 vueltas en las dos carreras previas. Es algo a lo que no estamos acostumbrados y hemos trabajado durante este fin de semana".