A sus 40 años, tras un último trayecto de lesiones en su rodilla izquierda, se vio obligado a abandonar el deporte que tanto amaba y lo llevó a la cima. "Estuve con morfina, con corticoides, estuve arruinado. Prácticamente no podía vivir con el dolor", relató Sergio, quien incluso fue notificado por los médicos sobre una infección que podía provocar la amputación de la pierna si no se operaba a tiempo.
Siendo consciente del diagnóstico complicado que tenia, Martínez llevó a cabo su pelea contra la leyenda boricua, Miguel Cotto, combate que terminaría con su carrera. El entrenador de Maravilla, Pablo Sarmiento, fue quien detuvo la pelea en la décima vuelta: "En los últimos rounds sus rodillas ya no respondían".
Hoy a sus 45 años tras dos años de entrenamiento y exigencia máxima en aguas termales con su nuevo entrenador, Tinín Rodríguez, se encuentra preparado para volver al ring. Como en sus tiempos de gloria, volverá a pelear en peso medio este 21 de agosto en un encuentro a 10 vueltas frente al campeón español, José Miguel Fandiño, diez años menor que él. Torrelavega será el lugar donde Maravilla buscará la victoria como cuando ganó su última pelea en tierras españolas allá por 2007 frente a Pavel Florin Madalin.
El tiempo pasó pero las ganas no, una vez más se podrá ver al mismo Sergio que triunfó frente a Julio César Chávez Jr en 2012. Maravilla hace unos meses en sus redes sociales publicó: "Dar un paso atrás no es retroceder. Es leer la vida de una mejor manera".
