El último partido que disputó Tigre de local fue la victoria que consiguió ante Atlético  Rafaela; en los últimos minutos del primer tiempo comenzaron a pelearse los integrantes de las diferentes facciones de la "barra" en el epicentro de la tribuna popular, cabecera inicial del José Dellagiovanna. Pocos minutos después llegó el entretiempo donde se desató la pelea más fuerte, entre piñas y más piñas la seguridad del estadio abrió los portones que desembocan a la calle Guido Spano que suelen estar cerradas para el acceso a esa tribuna, ya que por dicha calle solo se permite el acceso a la platea del estadio. Todos los muchachos que habían comenzado la pelea durante el partido salieron a terminar de pelearse en las inmediaciones del estadio dejando 18 detenidos como resultado.

En el día de mañana, tanto el Aprevide como AFA darán a conocer el veredicto para todos aquellos clubes que han tenido inconvenientes en dicha fecha con sus respectivas "hinchadas" (Godoy Cruz, San Lorenzo, Quilmes y Tigre). Se estipula que sancionarán a todos estos con un partido a puertas cerradas tanto para socios como para no socios. Como siempre, el socio termina pagando los platos rotos ajenos.

El último antecedente similar tuvo lugar en 2013, fue cuando la "hinchada" de Tigre esperaba para abordar un micro que los llevará a la cancha de River y luego de una pelea que dejó un saldo de un muerto y otros heridos, se decidá que el próximo partido (en aquel entonces ante All Boys) se hiciera a puertas cerradas, aunque luego de cumplir esa sanción, por orden del Aprevide el Club Atlético Tigre no pudo vender entradas a los no socios por un largo tiempo. Horas decisivas para el Matador de Victoria.