Sigue la puesta a punto. Tigre no para. Con un ritmo intenso, cada tres días, el Matador, tanto con su equipo titular como el alternativo, van adquiriendo rodaje futbolístico ante rivales de gran calibre. El más reciente, la doble prueba ante Godoy Cruz en el Coliseo de Victoria. Este sábado, tocó ir nada menos que a Núñez, para enfrentarse a River Plate, dirigido por Marcelo Gallardo, uno de los equipos que mejor se reforzó para el próximo campeonato.
En primer lugar, turno de jugar para los suplentes de ambos bandos. Tigre salió así al verde césped del Monumental: Adrián Gabbarini (Fernando Lugo); Santiago Villarreal, Mariano Echeverría, Paulo Lima, Bruno Urribarri; Diego Castaño (Facundo Cardozo), Alexis Castro; Kevin Itabel (Gaspar Iñíguez), Lucas Wilchez (Diego Sosa); Sebastián Rincón y Ramón Miérez. Estuvo en este once Rincón, que venía jugando para los titulares, y la ausencia de Carlos Luna se justifica dado que el Chino padece una distensión en el isquiotibial de la pierna izquierda, que lo marginará 10 días. Asimismo, pudo tener acción Gaspar Iñíguez, el flamante refuerzo.
Ganaba el Matador 1-0, con un cabezazo certero de Echeverría, tras un buen envío de Pucho Castro. Parecía que el conjunto de Pedro Troglio se llevaba la victoria en el primer amistoso; sin embargo, sobre el final, Gonzalo Montiel igualó para el dueño de casa. Más allá de eso, fue más que positivo que el Flaco convirtiera y recupere la confianza.
En segundo término, los titulares: Javier García (Gabbarini); Paulo Lima, Erik Godoy, Oliver Benítez, Emiliano Papa; Martín Galmarini (Iñíguez), Lucas Menossi (Cardozo); Jorge Rodríguez, Diego Morales, Lucas Janson (Itabel); Federico González (Miérez). Misma táctica, pero cambios de nombres; con Lima ubicándose de 4, Pato Galmarini regresando a su puesto en el mediocampo, Japo formando el tridente adelantado, y afuera Rincón, que jugó para los suplentes.
En esta ocasión, Tigre fue superior y con contundencia e insistencia, goleó 3-0, con doblete de Janson y el restante de Fede González, ambos tantos en el complemento. Gran nivel del equipo, generando varias situaciones de gol, cercando la valla propia y sin perdonar a la del rival, que hay que considerar que jugó con lo mejor que tenía a disposición y que disputará dentro de poco la Recopa. Troglio y sus jugadores volverán felices a Victoria.