El sábado por la noche Estudiantes empató en cero ante Boca en el Estadio Ciudad de La Plata, luego de una semana de muchas polémicas, cambios de horario, y búsquedas de sacar ventaja deportiva en el escritorio por parte de la visita.

Finalmente Santiago Ascacibar, Juan Foyth y Lucas Rodriguez pudieron jugar, montando un súper operativo para que lleguen a Ezeiza en menos de una hora. Los tres Sub 20 completaron el partido y fueron las figuras de un encuentro picante dentro del campo de juego, que contó con 30 mil almas vibrando en el estadio.

La estrategia de retrasar el cotejo para que no puedan jugar, no funcionó. Se dispuso de un helicóptero para trasladar a los seleccionados al aeropuerto. Finalizó el partido, ducha rápida, y vestidos con prendas de la Selección Argentina, emprendieron rumbo al mundial Sub 20 de Corea.

Para agregarle más pimienta al partido, un claro penal no fue cobrado: Rossi impactó de lleno con sus puños, en la cara de Cavallaro, que saltó a cabecear fuera del área chica.

El arbitraje dio las divididas al visitante, y Nelson Vivas, quien parecía tener nervios de acero y vivir plenamente en paz los partidos, explotó: Se fue expulsado, se arrancó la camisa y se metió en el vestuario. Todo lo anterior lo hizo estallar, como nunca.

Pero para destacar, el DT dio la cara terminado el cotejo, pudiendo irse sin hablar. Ante las preguntas de los periodistas presentes, aclaró la situación y dijo: "Interpreté que la jugada era un claro penal. La reacción no fue apropiada, fue injustificada".

El sábado será el 'clásico', y seguramente, Vivas no podrá estar en el banco de suplentes.