A los 30 años, la mayoría de los jugadores buscan afianzarse, mantener la titularidad, sabiendo que pueden estar entrando en la recta final de su carrera. Sin embargo, algunos, como Gabriel Mercado, no bajan los brazos y van por los desafíos en este momento, el de mayor madurez.
Debutó en Racing Club en 2007, a días de cumplir los 20 años, y en 2010, luego de casi 100 partidos, se fue a Estudiantes de La Plata, reciente campeón de la Copa Libertadores de América y que quería repetir. Sin embargo, no se le dio y en 2012 dejó la ciudad de las diagonales para jugar en River Plate, donde llegó a su mejor forma.
146 partidos, 11 goles, seis asistencias y siete títulos, entre ellos su revancha, ganando una Libertadores, lo convierten en un emblema del Millonario en los últimos años.
Ese gran desempeño en el conjunto de Núñez le abrió nuevamente las puertas de la Selección, donde ya había jugado un partido en 2010, luego de ganar el Mundial Sub 20 de 2007. Con presencias intermitentes en 2013 y 2015, compitiendo con Pablo Zabaleta, se fue ganando el lugar en 2016, hasta convertirse en un pilar del equipo, anotando tres goles además, dos de ellos muy importantes, en las actuales eliminatorias.
En la temporada que termina, Mercado cumplió un sueño: jugar en Europa. Y de qué forma, ya que lo hizo siendo titular del Sevilla tricampeón de la Europa League, con 40 presencias y tres tantos.
Con confianza, el apoyo del público y un importante palmarés sobre sus hombros, se perfila para ser el lateral titular del nuevo proyecto del ex sevillista, Jorge Sampaoli,