Antes de la llegada de Diego Pablo Simeone al Atlético de Madrid, el club colchonero era un equipo más de tantos que había. Es cierto que tenía grandes jugadores y peleaba por puestos en copas europeas, pero teniendo en cuenta la calidad del plantel con la que contaba el equipo, sumado a su rica historia en el fútbol español, sus logros y ambiciones se quedaban cortos.
Hay que destacar que el equipo “pre-Simeone” se consagró campeón de la Europa League en la temporada 09/10 superando al Fulham por 2-1 con dos goles de Diego Forlán, pero esa temporada los Colchoneros terminaron novenos en la liga española y en la siguiente séptimos. Campañas muy flojas para un equipo que, además de contar con el uruguayo Forlán, tenía en sus filas a Sergio Agüero. El equipo tocó fondo cuando en la temporada 11/12 quedaron eliminados de la Copa del Rey en dieciseisavos de final ante el Albacete y el 27 de diciembre de 2011 fue presentado Simeone en el banquillo de los rojiblancos.
Desde la llegada del “Cholo” a Madrid todo ha sido color de rosa para los fanáticos colchoneros: una Copa del Rey venciendo en la final al Real Madrid en el Santiago Bernabéu (primera victoria del Atlético sobre los merengues en 14 años); una Liga, consagrándose campeón en el Camp Nou; una Supercopa de España, venciendo al Real Madrid y por supuesto la obtención de la Europa League y la Supercopa de Europa en el año 2012 venciendo al Athletic de Bilbao y al Chelsea respectivamente, convirtiendo Radamel Falcao cinco goles entre las dos finales.
Y a este gran palmarés hay que sumar las dos finales de Champions League perdidas ante su clásico rival en 2014 y 2016, antes de Simeone el Atlético solo había llegado a una final de Champions en su historia, fue en 1974 cuando cayó frente al Bayern Munich de Franz Beckenbauer y Gerd Müller. Sin duda que la llegada del argentino a la dirección técnica del club ha marcado un antes y un después en su historia.
Este miércoles en la ciudad de Lyon el Atlético Madrid buscará su conseguir su tercer Europa League, segunda bajo el mando de Simeone. El equipo colchonero llega como el favorito, siendo segundo en la liga española a falta de una fecha, solo por detrás del Barcelona y por encima del Real Madrid, con una dupla ofensiva de clase mundial. Antoine Griezmann y Diego Costa son las principales cartas de gol con las que cuenta el equipo español habiendo marcado cuatro y dos goles respectivamente (Diego Costa llegó a mitad de la temporada).
Si bien ambos han quedado lejos de Ciro Inmóbile, quien es el máximo artillero del torneo, sus anotaciones han sido clave para posicionar a su equipo en la final, ya que fueron ellos quienes le marcaron al Arsenal en semifinales dándole a los de Simeone el boleto a Lyon y buscando repetir lo hecho por Agüero y Forlán en el 2010 y por Falcao en el 2012. Aunque algunos ven a este posible título como un premio consuelo por haber quedado eliminado de la Champions League en fase de grupos.
El palmarés internacional del Atlético Madrid lo componen: dos Europa League (2010 y 2012), dos Supercopas (2010 y 2012), una Copa Intercontinental (1974), una Recopa de la Uefa (1962) y una Copa Intertoto (2007). Hay que tener en cuenta que el equipo de la capital española está invicto en lo que a finales de Europa League se refiere, las dos que ha jugado las ha ganado.
En los antecedentes entre los finalistas solo se encuentran dos partidos, correspondientes a la fase de grupos de la Champions League 08/09, habiendo empatado en Francia sin goles y en Madrid con una victoria colchonera por 2-1. Además, el campeón del torneo participará de la Supercopa de Europa que se lleva a cabo al inicio de temporada entre el ganador de la Europa League y el vencedor de la Champions, por lo que podría darse otro clásico madrileño en una final, el quinto desde la llegada de Simeone, pero para eso debe ganar el miércoles. ¿Podrá el Cholo llevar a su equipo de vuelta a lo más alto?