El 24 de mayo del 2007 Boca Juniors jugaba el partido de vuelta contra Libertad de Paraguay por los cuartos de final de la Copa Libertadores. Previamente, en el partido de ida disputado en La Bombonera, el equipo visitante ganaba 1-0 y Román había errado un penal, pero finalmente aparecería Martín Palermo para convertir sobre la hora el gol del empate.

Boca llegaba a Paraguay con el deseo de obtener el pase definitivo a las semifinales, pero para eso debía ganar al Gumarelo en su casa. Ya en la cancha, el Xeneize se mostró superior al equipo paraguayo y en el segundo tiempo del encuentro llegaron los goles. El primero fue a los 62 minutos, Juan Román Riquelme estando desgarrado, armó un magnífico gol sacándose a un hombre de encima y mientras se acercaba a la medialuna ejecutó un disparo bajo que agarró al arquero mal parado. El segundo llegaría a los 71' a partir de un corner, fue Palermo quien le bajó la pelota a Rodrigo Palacio y éste definió sin dificultades.

A partir de ese importante triunfo, Boca se clasificaba para las semifinales de la Libertadores una vez más. En esa instancia se mediría ante Cúcuta Deportivo en el estadio General Santander de Colombia.

 

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