Roger Federer tuvo otra jornada de intenso trajín en Shanghai, pero sobre el final encontró la forma y superó a Roberto Bautista Agut por 6-3, 2-6 y 6-4 para sacar boleto a cuartos. El ex número 1 del mundo viene sufriendo en sus últimos dos enfrentamientos, pero siempre tiene una cuota de talento que lo diferencia de los demás y lo hace ganar en los momentos más complejos.
El primer parcial comenzó con un puro dominio del suizo, con puntos de altísimo desgaste y un control en el marcador que iba de la mano con el historial entre ambos: 17 sets jugados, 17 ganados por Roger.
Para colmo, en el comienzo del segundo Federer quebró de entrada y todo hacía prever un camino sin fisuras hacia la rueda de los ocho mejores. Pero el español tenía otros planes. Con cuatro games en fila y agrandado en un torneo donde supo ser finalista dos años atrás (victoria sobre Novak Djokovic incluida), Bautista encarrilló el set hasta ganarlo por 6-2 y forzó otra definición con incertidumbre para el helvético.
En el parcial decisivo, camino sin quiebres hasta 4-4. Y allí, como había sucedido en el debut ante Daniil Medvedev (6-4, 4-6, 6-4), Federer halló la manera y torció el partido, logrando el quiebre necesario para sellar el triunfo.
Ya en cuartos, a Roger lo espera el japonés Kei Nishikori, quien pasó a Sam Querrey y se ilusiona con llegar a las Finales de Londres. Por esa llave de semifinales también marcha Juan Martín del Potro.
Roger necesita ser campeón para aspirar a seguir en el Top 2. Cualquier otro resultado lo sacará de ese lugar después de 14 meses. Pero en caso de que Novak Djokovic (que se vengó de Marco Cecchinato y también está en cuartos) llegue a la final, ya nada impedirá que el serbio lo despoje del segundo escalón.