Frances Tiafoe, un nombre que dará que hablar en el mundo del tenis. De hecho, ya lo está haciendo. A los 20 años el estadounidense ganó su primer torneo ATP luego de eliminar a jugadores de la talla de Del Potro, Chung y Shapovalov, y es uno de los Next Gen que promete meterse entre los mejores del mundo en un mediano plazo. Jugó su primera final con actitud y solvencia, como si se tratara de un hombre experimentado y no un jugador que está dando sus primeros pasos en el circuito.

En frente tenía a Peter Gojowczyk, un alemán que evolucionó mucho en los últimos meses pero no estuvo a la altura en esta final. No estuvo fino con el saque, tal vez su mejor arma y no pudo derrotar a otro estadounidense en Delray Beach. Ya lo había hecho con Isner, Opelka y Johnson, en una gran semana que no pudo coronar con el título.

Tiafoe apabulló a su rival desde el comienzo. Se llevó el primer set en tan solo 25 minutos tras aprovechar un flojo primer servicio de Gojowczyk -31 por ciento- que le permitió quebrar en dos oportunidades. Tal vez por los nervios propios de una final, el alemán cedió su saque tras 47 games consecutivos manteniéndolo durante el torneo. Además, tampoco pudo conseguir un ace, frente a siete de Tiafoe.

Para marcar la notoria superioridad del estadounidense en el primer parcial, hace falta ver la cantidad de tiros ganadores: 28, 13 más que su rival. Por su parte, Gojowczyk no pudo aprovechar el único punto de quiebre que tuvo, en el tercer game, lo que le hubiese permitido volver al partido. Así, el primer set fue para el local por 6-1.

En el segundo set Gojowczyk, a pesar de mejorar sus porcentajes con el servicio volvió a perder rápidamente su saque y, aunque lo recuperó, lo dejó ir nuevamente y con él, el partido. Su vistoso juego quedó opacado por un soberbio Tiafoe que no le dio chances.

El estadounidense es una bocanada de aire fresco para el tenis de su país que ha sabido sacar grandes jugadores y en el último tiempo no logra encontrar a su gran estrella. Si Tiafoe sigue por este camino, es el gran candidato a serlo. Por lo pronto, con 20 años, ya ganó su primer torneo ATP.