El '3' es un número que para cualquier otra franquicia sería probablemente un número cualquiera, pero para los Miami Heat es un símbolo de su historia, un número que ha marcado la época más gloriosa de la franquicia del Este. El portador de este número y el nombre que será recordado por ser quien trajo el primer anillo a la franquicia es el de un hombre de Chicago que llegó en el año 2003, Dwyane Wade. El escolta se encuentra con el futuro más incierto y es que el jugador es agente libre y esta analizando cual de las opciones que posee es la mejor.

Pero para conocer el motivo de su idilio con los Heat hace falta analizar su historia. Todo comenzaba el 26 de junio de 2003, los Miami Heat elegían en la quinta posición a un escolta de Chicago que había promediado en sus dos años de universidad 19,7 puntos, 6,5 rebotes, 3,9 asistencias y 2,3 robos. Wade llegaba a unos Heat que no participaban en los playoffs desde hacía dos años, y a lo largo de su historia la franquicia solamente había conseguido llegar a las finales de conferencia en la temporada 1996-97, siendo eliminados por los poderosos Chicago Bulls de Michael Jordan.

Dwyane Wade realizó un gran primer año liderando a su equipo hacía los playoffs, donde el jugador daría su máximo nivel llegando a ser determinante para su equipo en los momentos clave, anotando la canasta ganadora en su primer partido de postemporada.

El equipo cayó en la siguiente ronda ante los Indiana Pacers, pero desde aquel momento comenzaba a forjarse el gran jugador que es. Fue tal el nivel del escolta que formó parte del primer quinteto de novatos de aquella temporada y siendo una de las sensaciones de la temporada junto a Carmelo Anthony y Lebron James.

Un salto hacía la cima

A la temporada siguiente, en el segundo año de “Flash”, llegaba un jugador que ayudaría a la franquicia a dar el salto de calidad necesario para poder ser de los mejores equipos de la liga y un aspirante en ciernes al anillo. El pivot Shaquille O'Neal llegaba a Miami tras ganar tres anillos en los Lakers y romperse su amistad con Kobe Bryant. La franquicia lograba ser el mejor equipo del Este tras lograr 59 victorias dando de esta forma un giro de 180 grados la situación de la franquicia que solo dos temporadas atrás perdía 57 partidos.

En el plano individual Wade ya se convertía en una de las estrellas de la liga en su segunda temporada tras promediar 24,1 puntos, 5,2 rebotes, 6,8 asistencias, 1,6 robos y 1,1 tapones, estos mismos números le valieron al jugador de Illinois para formar parte del partido de las estrellas del All Star Weekend. Otro de los logros que consiguió el jugador fue formar parte del segundo quinteto de la NBA y el segundo quinteto defensivo dejando claro que era un jugador que dominaba y aportaba en ambos lados de la cancha.

El equipo llegaba a las Finales de Conferencia en los playoffs pero caía ante los Detroit Pistons de los nuevos “Bad Boys” tras desperdiciar un 3-2 que tenía a su favor. Wade dejó grandes actuaciones anotadoras en la eliminatoria como los 42 y 36 puntos que anotó en el segundo y tercer partido respectivamente.

Tras quedarse a un solo paso de llegar a sus primeras finales los Miami Heat, la temporada siguiente arrancaba con el objetivo de alcanzarlas y el escolta mejoraba aun más sus estadísticas individuales promediando  27,2 puntos, 5,7 rebotes, 6,7 asistencias y 2 robos de media, quedando de nuevo encuadrado en el segundo mejor quinteto de la liga. Su gran estado de forma sirvió para que los Miami Heat llegarán por fin a sus primeras finales. En ellas Wade fue el gran héroe, ya que ayudó a que el equipo remontara el 0-2 con el que empezó la eliminatoria.

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Su anotación en los últimos cuatro partidos fue decisiva ya que anotó por orden 42, 36, 43, y 36 puntos siendo una de las actuaciones más extraordinarias realizadas en unas finales. Y precisamente este nivel descomunal le sirvió a Wade para lograr el MVP de las Finales dando una exhibición y demostrando que en aquel momento con solamente 3 temporadas en la liga ya era uno de los mejores de la competición.

Unos años por el desierto

Las siguientes cuatro temporadas Dwyane Wade estuvo lastrado por las lesiones, las cuales también impidieron que su compañero Shaquille O'neal mostrara su mejor versión. Esto desemboco en que aquel equipo campeón en 2006 no volviera pisar unas finales con su famoso duo entre algodones. En la temporada 2007-2008 el pívot abandonaba la franquicia rumbo Phoenix y precisamente ese año fue el único que Wade durante su estancia en los Heat no disputó los playoffs. El equipo comenzó una reconstrucción que finalizaría en 2010, cuando Pat Riley consiguió unir a 3 de las grandes estrellas de la liga.

Un equipo de ensueño con un triste final

En la agencia libre del año 2010, cabía la posibilidad de que la máxima estrella de los Miami Heat abandonara la franquicia si no se conseguía un proyecto ambicioso y Pat Riley le proporcionó el que probablemente fuera en aquel momento el mejor proyecto posible. El Manager General conseguía unir en un mismo equipo a tres All Stars de alto nivel y casualmente a tres componentes de aquel Draft de 2003.

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Wade vio como tenía que ceder el liderazgo del equipo a Lebron James y como no recuperaría su máximo nivel por culpa de las lesiones pero lo que si consiguió fue volver a las finales en cuatro ocasiones logrando dos anillos más. Pero este ambicioso proyecto se derrumbó tras la marcha de Lebron James de vuelta a Cleveland. El equipo nunca volvió a ser aspirante debido a que Bosh se vio afectado por una enfermedad cardiorespiratoria que le costó la retirada y el escolta de Chicago continuaba con problemas físicos, lo que desembocó en una situación que los aficionados de Miami pensaron que no llegaría nunca: la marcha de su mayor estrella.

Un exilio en busca de recuperar la gloria

Dwyane Wade abandonaba Miami en la agencia libre de 2016 poniendo rumbo a los Chicago Bulls, de esta forma el escolta buscaba un proyecto ambicioso y que pudiera dar el nivel en Playoffs y además triunfar en su ciudad natal, en su casa. Pero desgraciadamente el proyecto no funcionó y el escolta firmó un buyout para poder unirse con su amigo Lebron James en Cleveland, ya que el jugador era conocedor de que jugar junto al “rey” era sinónimo de posibilidades de luchar por el anillo. Aunque de nuevo el proyecto no prosperaba y el escolta volvía traspasado a su querida ciudad de Miami.

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Un futuro incierto

El veterano escolta es por el momento agente libre y se desconoce cuál será su decisión ya que posee múltiples posibilidades. Su primera opción podría ser la de unirse a un equipo con aspiraciones al titulo por el mínimo de veterano intentando ampliar aún más su palmarés. Otra posibilidad sería jugar en China, ya que ha recibido una oferta espectacular y tentadora desde el lejano oriente. Una última temporada en Miami sería otra opción posible para el escolta acabando su carrera en el equipo que le vio nacer y la última y más dolorosa posibilidad sería finalizar su carrera. Veremos cuál es la decisión de Wade pero desde luego es indiscutible que su carrera ha sido gloriosa y llena de triunfos, la camiseta con el '3' será probablemente una de las más especiales en la fachada del American Airlines Arena.