Anthony Gill, ala-pívot nacido en Charlottesville hace 27 años, no continuará defendiendo los colores del BC Khimki tras escoger la opción de convertirse en agente libre y decidir dónde jugar la próxima campaña, que se presenta fundamental para que el jugador estadounidense se consolide como un fijo en los planes de los equipos del continente europeo. Esta decisión ha provocado que varios equipos de la Euroliga se fijen en él y piensen en hacerse con sus servicios de cara a la próxima temporada.

De esta forma y tras tres cursos vistiendo la elástica del conjunto ruso, Gill, que contaba con ofertas NBA en las que su rol se preveía menor, dispondrá de varios meses para decidir sobre su futuro. Anthony Gill, en este su tercer año en Moscú, promedió  en la máxima competición continental 8.3 puntos, 4.5 rebotes y 1.2 asistencias en veinticinco encuentros disputados. Sus números le colocaron con la vitola de jugador clave en los esquemas de juego y planes de Georgios Bartzokas, entrenador de la plantilla rusa. 

En el Khimki también se conoció hace escasos días que Devin Booker ejercería su derecho para convertirse en agente libre al quedar libre. El jugador nacido en Whitmire, Carolina del Sur, no descarta continuar en el conjunto ruso, pero podrá sopesar su decisión y tener en cuenta las ofertas que le lleguen desde otros equipos de la Euroliga. Booker promedió 11.6 puntos, 4.8 rebotes y 1.2 asistencias por partido en la competición europea por excelencia. Sin embargo, todavía es pronto para negociaciones y rumorología, dado que la principal incógnita continúa siendo la reanudación de la temporada, tanto a nivel nacional, como internacional. Por ello, Gill y Booker deberán esperar y mantenerse en forma ante una ya probable vuelta a la nueva normalidad en la Euroliga.