La primera jornada del presente campeonato europeo terminaba con un interesante encuentro entre dos grandes selecciones, Israel e Italia, selecciones pertenecientes al grupo B. Los locales, uno de los anfitriones de este multicultural Eurobasket, llegaba al parqué del Tel Aviv Arena con el apoyo de toda su afición.

Liderados por el nuevo jugador de los Golden State Warriors, Omri Casspi, el conjunto israelí era consciente de la gran dureza de dicho enfrentamiento. Por ende, salieron con toda la carne en el asador desde el salto inicial. Por el lado opuesto, los hombres de Ettore Messina venían con la importante baja de Danilo Gallinari. Empezar con una victoria era fundamental para saber que son capaces de competir sin el jugador de los Denver Nuggets.

El partido comenzó de manera intensa. Casspi y Hackett consiguieron un dos más uno para sus respectivas selecciones, aunque este último falló el tiro libre adicional.

Poco después, Marco Belinelli rompió el marcador con dos triples de forma consecutiva. Tras una mate de Melli, Israel tuvo que pedir el primer tiempo muerto del encuentro con un 13-5 en el marcador.

Los hombres de Erez Edelstein lograron reconducir el partido, aunque durante un periodo de tiempo muy corto, pues la defensa y el acierto exterior de Italia se impusieron ante una selección israelí con unas ideas poco claras. El segundo cuarto comenzó de la misma manera. El italiano Filloy anotó cuatro puntos consecutivos, para poner un diferencia de diez puntos. El base transalpino ha sido de constante dolor de muelas para la defensa local. Sin lugar, el mejor hombre desde el banquillo de Messina. 

A pesar de la diferencia en el marcador, el partido continuaba siendo muy competitivo. Ambas selecciones peleaban todos los balones e intentaban atacar. No obstante, las defensas se solían imponer a las jugadas ofensivas; excepto con un jugador.

Belinelli y su francotirador

Con 18 puntos, Marco Belinelli fue el jugador del partido (Foto: FIBA)
Con 18 puntos, Marco Belinelli fue el jugador del partido (Foto: FIBA)

El escolta italiano fue un constante rompecabezas para la selección israelí. No sabían qué hacer con él, no sabían cómo pararlo. Aparecía en cualquier lugar de la cancha. Carrera de un lateral a otro, bloqueo y catch & shoot. Esa misma jugada una y otra vez. Sin embargo, cuando el jugador de los Atlanta Hawks tiene la muñeca caliente, se muestra imparable desde cualquier lugar de la cancha. Domina el arte del triple como pocos. Y, eso, lo hizo una y otra vez. Al descanso, ya contaba con cinco triples, de solo seis intentos. Era, sencillamente, impresionante.

Por el bando contrario, Omri Casspi se echaba a su equipo a las espaldas. En torno a su figura, el conjunto israelí construía, pero sin mucho acierto. Al descanso, solo les había entrado uno de los siete triples intentados. Ello, unido al dominio reboteador de los italianos, hacía muy difícil acercarse en el marcador.

Israel: últimos dos cuartos para olvidar

Tras el descanso, el guión de esta guerrillera película no cambió. Esta vez era Luigi Datome el que comenzaba a hacer mucho daño, tanto en la pintura como en la línea de 6,75. En esta ocasión, Howell era, prácticamente, de los pocos jugadores acertados en Israel.

Mientras que se podía ver a una Italia luchadora, con confianza y determinación en ambos lados de la pista, el conjunto local no paraba de cometer errores. Había una constante mala dirección en el juego del equipo, además de decisiones muy mal tomadas. Israel no sabía que hacer en muchos momentos. Como prueba, los más de tres minutos que estuvieron sin anotar

Italia era todo lo contrario. Solidez defensiva, en la cual se notaba de forma profunda la mano de Ettore Messina. Tenían claro, en todo momento, qué hacer con el balón; aunque no estuvieran muy acertado en ataque.

Definitivamente, el encuentro iba perdiendo cada vez más ritmo e, Italia, lo aprovechó para rematarlo. De la mano de Datome, Filloy y, por supuesto, Belineli, el conjunto transalpino finiquitó el partido ante una Israel con tremendas debilidades. Poco a poco se fueron desinflando y, los visitantes, supieron aprovechar las oportunidades para llevarse el partido.

El próximo encuentro que tendrán que disputar será el sábado día 2 de septiembre. Italia lo hará ante Ucrania, a las 17:30 (hora española); mientras que Israel jugará contra la peligrosa Lituania a las 20:30. Este último juego se muestra muy entretenido para el espectador. Ambos están necesitados de victorias, y lo darán todo para llevarse el enfrentamiento.

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Sobre el autor
Antonio Jesús Jiménez
Estudiante ambicioso en busca de un futuro incierto.