El partido estuvo a la altura de una final de conferencia en la que solo los equipos más expertos y avezados a disputar este tipo de eliminatorias son los que consiguen llevarse siempre la victoria. Minnesota United FC fue el equipo que comenzó jugando con mayor intensidad y tratando de imponer su juego, lo que le permitió adelantarse en el marcador gracias a un golazo de falta de ‘Bebelo’ Reynoso. Los Sounders trataron en la primera mitad de llevar el partido a su terreno, pero no consiguieron poner en riesgo el resultado. La segunda mitad mejoró para los visitantes en el ecuador gracias a un segundo gol que les ponía un pie en la final. Pero cuando te enfrentas a un equipo como los Sounders no puedes fiarte y tienes que jugar al 100% durante todo el partido. ‘Los Loons’ bajaron la guardia en los últimos minutos y eso les costó tres goles con los que cayeron eliminados y dieron a su rival el pase a la final por cuarta ocasión en un lustro.

Reynoso Superstar

Buenos primeros minutos de salida por parte de Minnesota United FC que insistió sobre la potería local, llegando a tener un par de acercamientos peligrosos en los que se toparon con un Frei que estuvo muy acertado. El conjunto ‘esmeralda’ por su parte le costó bastante llegar con el control de la pelota a las inmediaciones del área visitante debido a la buena presión que estos realizaron en zona de creación, no permitiendo a su rival encontrar espacios entre líneas.

Con el paso de los minutos, ese inicio tan intenso que tuvieron ‘Los Loons’ fue desvaneciéndose en favor de unos Sounders que consiguieron hacerse con el control de la pelota, pero no encontraban la manera de generar peligro. Con la defensa visitante muy cerca del área y dejando muy poca distancia, el juego vertiginoso de los locales apenas surtía efecto, facilitando el trabajo defensivo rival.

Se llegó al ecuador de la primera parte con el equipo local siendo cada vez más y más incisivo y encontrando espacios a la espalda del lateral derecho de los visitantes que en unas ocasiones Morris y en otras Ruidíaz apareciendo por banda, consiguieron llegar con peligro. Era cuestión de tiempo que la primera ocasión llegase y esta apareció sobre el minuto 26 con una internada de Joao Paulo en la que desde el borde del área disparó a puerta, pero la pelota llegó mansa a las manos del guardameta.

Sin embargo, en la siguiente acción, la primera en mucho tiempo para Minnesota United, los visitantes hicieron saltar la sorpresa en el marcador. Un libre directo cinco metros alejados del área dio la oportunidad a ‘Bebelo’ Reynoso de hacer una de sus diabluras. El playmaker argentino, con un magistral libre directo, colocó la pelota lo más ajustado al palo posible para hacer inútil la estirada de Frei y adelantar a su equipo en el marcador. Un gol muy importante para los visitantes ya que habían logrado tomar ventaja y estaban consiguiendo mantener a un rival muy peligroso en ataque, lejos de su portería.

Con este gol, los locales se vieron obligados a dar muchos más de ellos y adelantar sus líneas para mejorar la presión sobre su rival, provocar recuperaciones más cercanas al área y así poder acercarse con mayor peligro sobre la portería. Pese a este nuevo planteamiento, no fueron capaces de tener un disparo a puerta, salvo algún remate aislado en acción a balón parado. ‘Los Loons’ al contraataque no tuvieron tanta participación, pero consiguieron realizar un par de avisos que solo se quedaron en eso, avisos.

Sobre este desarrollo se llegó al final de los primeros 45 minutos, con un equipo visitante por delante en el marcador, después de aprovechar sus oportunidades y un equipo local que no conseguía encontrar su mejor versión.

Por algo son campeones

Con el inicio de la segunda mitad se pudo ver claramente un planteamiento esperado en el que Seattle Sounders tenía el control de la pelota, tratando de imprimir velocidad a sus acciones y un rival que mantenía un repliegue defensivo y presión en zona de creación y finalización para impedir que los locales les generasen cualquier ocasión que pudiese poner en riesgo el resultado.

Antes de que se cumpliesen los 10 primeros minutos, los locales consiguieron igualar el marcador en una acción de Ruidíaz en la que se deshizo de un central y al encarar portería, superó al portero en el mano a mano. Sin embargo, tras revisarle por el VAR, el colegiado anuló la acción ya que, el delantero peruano había realizado una carga no permitida sobre el defensor, impidiendo que este pudiese disputar la pelota.

Tras esta ocasión, el partido se convirtió en un monólogo y un asedio de los ‘esmeraldas’ viendo como poco a poco la intensidad en el juego de su rival disminuía y eso abría espacios que comenzaban a aprovechar. Fueron varias las ocasiones en las que consiguieron llegar hasta la línea de fondo, pero fallaron en ese último pase que dejase a un jugador en clara opción de anotar.

Superada la hora de partido llegó una nueva ocasión para el equipo local, después de muchos minutos sin lograr superar a su rival. Desde la frontal del área, Morris recibió una pelota y con libertad para darse la vuelta y perfilarse, soltó un potente disparo que se estrelló en la escuadra, dejando al guardameta totalmente estático y sin posibilidad de reacción. Si esta ocasión fallida fue un duro palo para los locales, más lo fue lo que ocurrió en la siguiente jugada. Una acción a balón parado en la que Reynoso una vez más, apareció para colocar una pelota en el punto de penal en donde Dibassy para rematar a gol y colocar dos goles de ventaja en el marcador.

Pero Seattle Sounders es un equipo campeón y supo sobreponerse a esa circunstancia. En el minuto 75 inició lo que sería una auténtica locura. Tras algunos momentos de presión sobre la portería visitante y en una acción sin apenas peligro, la pelota llegó rebotada a los pies de Bruin que sin pensárselo y a la media vuelta, consiguió superar al portero con un disparo cruzado y recortar distancias.

A partir de ese momento el partido se convirtió en un acoso y derribo sobre la portería visitante con constantes llegadas. Estos tampoco se quedaron esperando y, aprovechando las acometidas de los Sounders, tuvieron varias acciones a la contra en las que dieron algún aviso a su rival para que este no se confiase. Sin embargo, la gran mayoría de las ocasiones estaban cayendo del lado local y era cuestión de tiempo que volviesen a gozar de una ocasión manifiesta de gol.

En el último minuto del tiempo reglamentario y en un saque de esquina, Seattle Sounders encontró la recompensa a los buenos minutos y a la insistencia mostrada durante toda la segunda mitad. Lodeiro colocó la pelota en el punto de penalti en donde apareció Svensson, pero su remate no fue a portería, sino que si dirigió al segundo palo. En esa posición, como un delantero muy inteligente se encontraba Ruidíaz que, libre de marca controló la pelota y ajusto su disparo al palo para mandar el partido a la prórroga.

Los locales continuaron asediando la portería de un Minnesota United FC totalmente superado. No eran capaces de deshacerse de la presión de un rival que generaba constantes ocasiones de peligro. Fue así como Ruidíaz nuevamente, controló una pelota en el segundo palo y disparó a puerta. Su potente remate golpeó en la madera, dejando claro que hasta que el árbitro señalase el final, las posibilidades se mantenían.

Y vaya que si tenían razón. En la última acción del partido, un nuevo saque de esquina fue lo que terminó marcando las diferencias. Lodeiro, nuevamente encargado de botar este tipo de acciones, sí encontró en esta ocasión a Svensson. El centrocampista sueco consiguió en esta ocasión conectar con la pelota y con un remate de cabeza cruzado, logró certificar la remontada y el pase a la final de la MLS Cup por cuarta vez en cinco temporadas de los Sounders.