La quinta jornada de la Serie A midió a Udinese y AS Roma, en un duelo de la parte alta de la liga, con un gran arranque de ambos conjuntos. El Estadio Dacia Arena, de Udinese, fue el lugar que acogió este choque.
Un Udinese que llegaba a este encuentro en buena forma, tras vencer en su último encuentro ante un rival, a priori superior, como es la Fiorentina, gracias a un único tanto anotado por Beto.
En cambio, una Roma que también llegó a este partido en una gran dinámica, ya que vencieron en su última jornada al AC Monza gracias al doblete de la ‘joya’ Dybala y un gol de Ibáñez.
Dominio equilibrado, salvo un error defensivo
El arranque del primer período estuvo condicionado por un grave error defensivo de Karsdorp, que dejó el esférico con el pecho para que Rui Patricio pudiera cogerlo, pero finalmente Udogie estuvo atento y aprovechó esa dejada para anotar el primer tanto del encuentro.
La iba a tener la Roma, concretamente Dybala, para poner las tablas en el marcador. Un gran pase en profundidad de Spinazzola para el astro argentino, que realizó un control orientado para quedarse frente a Silvestri, quién acabó despejando el chut de la ‘joya’ a saque de esquina.
Numerosas llegadas iba a tener el Udinese para ampliar su ventaja en el electrónico. Una falta que lanzó Deulofeu en el 20’ se marchó por el lateral de la red. Luego Success en el 27’ iba a rematar un balón centrado por Pereyra, pero se le marchó por muy poco. En el saque de puerta ocasionado por el propio Success tras fallar su tiro, Deulofeu robó el balón y chutó a puerta, pero también se le fue ligeramente desviado por el lateral de la red.
Posterior a estas aproximaciones, también las tuvo la Roma. Pellegrini chutó una falta rondando el 36’ de manera directa, Silvestri despejó y el esférico le cayó a Abraham, pero su disparo se fue alto. Dybala puso una falta al área en el 38’, que fue rematada por Mancini, aunque su remate se marchó por muy poco por encima del travesaño.
Para finalizar las ocasiones de peligro antes de llegar al tiempo de descanso, tras una jugada ensayada y un gran centro al área, el esférico le llegó a Pereyra, que se sacó una volea de la manga, aunque Rui Patricio atrapó el tiro en dos tiempos y no hubo problema.
Caótico segundo tiempo de la Roma
El comienzo del segundo acto iba a llevar la tónica del final del primero: muchas llegadas y un duelo muy disputado.
Lazar Samardzic recibió un balón en el 56’ por parte de Deulofeu y sacó un potente disparo desde fuera del área que entró por toda la escuadra izquierda para poner el 2-0 en el marcador.
Mancini pudo haber recortado la ventaja del Udinese gracias a un gran centro de Dybala que aprovechó el central italiano, aunque su remate de cabeza se estrelló contra el palo.
Pero lo peor estaba por llegar para ‘La Loba’. Una gran internada de Makengo por la banda, dejando rivales atrás, desencadena un pase atrás del francés que aprovecha Pereyra para rematar con potencia al lado izquierdo de la portería y vencer a Rui Patricio. 3-0 en una noche histórica en el Dacia Arena.
Aunque, a pesar de que iban perdiendo 3-0 y en vez de luchar por un gol que les permita creer, la Roma se vino abajo y llegó el cuarto gol del Udinese. Un buen contraataque protagonizado por Pereyra, que asistió a Lovric para anotar el 4-0 definitivo. José Mourinho y sus jugadores estaban hundidos.