El Liverpool sigue en su empeño de seguir siendo el equipo que vaya por detrás del todopoderoso Manchester City en la Premier League molestando a los otros clubes grandes que quieren alcanzar el mismo logro. A base de goles y fútbol, vencieron con goleada a un West Ham que se vio superado ante su rival sobre todo, en la segunda parte del partido, dónde recibió la mayoría de los goles contra un rival que se estaba gustando mucho.

Salah, Mané y Firmino volvieron a marcar haciendo un gran partido

El Liverpool, con esta victoria, sigue confirmando su mejoría yendo de goleada en goleada. Lo sufrió el Porto en Champions League y ahora lo ha sufrido el West Ham. Con una delantera inspirada y motivadora, el Liverpool tiene ante sí la oportunidad de colarse al segundo puesto sólo bajo la sombra del espectacular equipo de Guardiola. A base de fútbol directo, Jürgen Klopp está haciendo que sus jugadores den lo mejor de sí mismos en cada partido.

David Moyes, sin embargo, se ha tenido que ir de Anfield con la sensación de que su equipo podía aspirar algo más en el partido. Con varias ocasiones durante el partido que podía haber cambiado el rumbo del marcador, el West Ham acabó pagando sus errores a base de desconcierto y desorden en defensa. Una nueva derrota para seguir estando alerta, pues no consigue deshacerse del todo de los puestos de abajo.

El fútbol y los goles lo ponen los locales

Con su habitual sistema de 4-3-3, Jürgen Klopp sólo hizo un cambio con respecto al partido frente al Porto. Decidió poner de inicio a Oxlade para así jugar los 90 minutos haciendo una gran actuación. El Liverpool, de esta manera, siguió con su habitual once de inicio con la amenaza del tridente ofensivo que volvió a cuajar una vez más, aunque el que abrió la lata fue el mediocentro Emre Can. Por su parte, el West Ham, ante la multitud de bajas que está atravesando el equipo durante toda la temporada tuvo que sacar el mejor once posible. Patrice Evra debutó en Premier League con la camiseta de los hammers jugando los 90 minutos. Arnautovic volvió a los terrenos de juego tras su lesión dejando en el banquillo a Chicharito Hernández, que no pudo anotar esta vez al jugar unos 10 mintutos.

Salah hizo su gol número 22 en la Premier League. Foto: Liverpool.

El Liverpool dominó de principio a fin cosechando varias oportunidades para marcar. Nada más empezar el encuentro, Salah estuvo a punto de abrir el marcador al darle un el balón al palo derecho de la portería. Se veía un equipo motivado desde el inicio del encuentro, pues remató 21 veces siendo 12 de ellas entre los tres palos. Los locales estuvieron cómodos en todo rato, pero también pudieron encajar algún que otro gol. Y es que Arnautovic estuvo a punto de silenciar Anfield tras una buena acción individual disparando a portería, pero Karius, atento, detuvo el peligroso disparo. 

Fue en la media hora del partido cuando Emre Can batió a Adrián San Miguel tras un saque de esquina cabeceando sin dar opción al portero. El gol local debía de llegar tarde o temprano y fue el turco el primero en anotar, pero no el último, pues el resto de los goles llegaron en la segunda parte.

El tridente ofensivo destrozó al West Ham

A pesar de ganar y de las ocasiones logradas en la primera parte, el Liverpool tan sólo vencía por la mínima pudiendo haber un zarpazo del West Ham, ya que con la calidad que tienen los de Moyes, un despiste de los reds podían ocasionar el empate del West Ham, pero los jugadores del Liverpool empezaron lanzados en la segunda parte como el inicio del partido, apretaron para conseguir el gol de la tranquilidad lo más antes posible.

Zabaleta sufrió el ataque de Salah. Foto: Liverpool.

Y así fue, a los seis minutos de la segunda parte, Alex Oxlade sirvió dentro del área a Salah, que mantuvo la sangre fría anotando su vigésimo segundo gol de la temporada. Pero la fiesta seguía seis minutos después con el tercer gol de los locales en un error defensivo del West Ham que Firmino aprovecha para batir al portero Adrián. 3-0 antes de cumplir la hora del partido para placer del Liverpool y angustia de los hammers.

A los dos minutos del gol de Firmino, el West Ham recortó distancias con un gran gol de Michail Antonio al hacer una gran carrera en solitario batiendo a Karius con un disparo dentro del área. Un gol que no hizo temblar a Anfield, pues la sensación de superioridad de los locales era bastante obvia a pesar del gol encajado.

El partido no acabó de esa forma, y es que tenía que llegar el gol del otro jugador perteneciente del espectacular tridente del Liverpool. Mané recibió un centro bombeado de Robertson y define con un disparo raso batiendo a Adrián para culminar el 4-1 definitivo de un partido espectacular de los locales para llegar a los 57 puntos esperando la resolución del Manchester United-Chelsea para estar pendientes de acabar la jornada segundo o tercero en la clasificación.

Por su parte, el West Ham sigue en el grupo de equipos de fuera del descenso pero con la sensación de tener que seguir y luchar por librarse de una vez. Con 30 puntos, está a tres del descenso, y la próxima jornada tendrá una cita importante con un rival directo, el Swansea.