Tras la resaca copera, un partido de altos vuelos se disputaba en el pabellón Anaitasuna de Pamplona, a las 21:15 de este viernes. Equipos que apenas tuvieron protagonismo el fin de semana pasado en el WiZink Center de Madrid, siendo eliminados a las primeras de cambio. El Barcelona Lassa visitaba al Osasuna Magna, tercero contra cuarto, un duelo entre dos equipos que ocupan las primeras posiciones de la tabla. Una victoria de Magna podría dar esperanzas a los navarros de colocarse entre los tres primeros de la competición, recortándole puntos a los catalanes. Los jueces de este encuentro serían los colegiados Cid Bragado y Martínez Torres.

Un partido de tú a tú, con los dos equipos mostrando sus armas desde los compases del juego. En una ocasión azulgrana, Lozano provocaría un penalti de Javi Eseverri. Ferrao no iba a desaprovechar la pena máxima, y el luminoso indicaría un 0-1 con cuatro minutos de juego disputados. Magna, a pesar de su error defensivo, saldría en busca del empate y probaba con disparos de larga distancia, intentando sorprender al guardameta Juanjo. Llegaba el ecuador de la primera mitad y el Barcelona controlaba el partido, incluso pudiendo aumentar las diferencias en el marcador a través de la estrategia, pero el voleón de Sergio Lozano se estamparía en la escuadra de Asier y los navarros respiraban aliviados, teniendo problemas de faltas, ya que se colocaban con cuatro.

Osasuna asomaba más por el área rival, liderados en este arreón por Eric Martel, buscando subir el primer gol local al marcador, estos minutos con más convencimiento, robando balones en primera línea. Andreu Plaza pedía tiempo muerto, viendo que el control del juego se le estaba yendo en estos últimos minutos. Juanjo seguía parando todo lo que se acercaba por su portería, evitaba el empate local. El Barcelona creaba peligro únicamente por Ferrao, mientras que su juego había bajado las revoluciones. Pero Ferrao, también sería decisivo en defensa, sacando bajo palos un disparo que había rebasado a Juanjo, en un disparo de Rafa Usín, y en el rechace, desde el suelo, Juanjo sacaba unas manos providenciales de nuevo. Con esto, se llega al comienzo de los primeros veinte minutos, con el Barça liderando el marcador.

El inicio de la segunda parte parecía que iba a ser parecido a lo visto en el último tramo del primer acto, pero tras un paradón de Juanjo a disparo de Martel, Ferrao, dando la media vuelta, colaba un misil en la portería de Asier y anotaba su doblete personal, pero sin tiempo casi para asimilarlo, Sergio Lozano supera al portero navarro y ponía el 0-3 en el marcador. Un Magna que veía en un minuto como se le ponía cuesta arriba el encuentro, donde podía haber sido peor, ya que Ferrao también estrellaría un balón en el palo. Ahora sí que el Barcelona tenía el control del juego y los ataques navarros eran frustrados una y otra vez. Llegábamos a los últimos diez minutos, con Arregui pidiendo tiempo muerto y Magna jugando de cinco a partir del tiempo.

Magna creaba ocasiones con la superioridad, pero no conseguía materializar las jugadas, hasta que, en un robo de la defensa azulgrana, y tras un pase perfecto a Joselito, este define con mucha clase ante Martel y anotaba el 0-4 azulgrana que reflejaba la superioridad en esta segunda parte. Pero con la insistencia, Rafa Usín disparaba hacia el segundo palo, donde estaba el eterno capitán Eseverri para empujar el balón y animar las gradas de Anaitasuna con el 1-4. Poco iba a durar las alegrías navarras, porque tras un mal pase de Martel, Aicardo al primer toque, ponía el balón entre los tres palos y llegaba el quinto gol, y en otra contra, Rivillos sentenciaba el partido con el 1-6 tras otro error del Magna.

Un partido que acababa así, Osasuna Magna que veía lejos ya a los tres primeros y un Barcelona Lassa que dormía segundo en la tabla clasificatoria. Un triunfo muy sólido de los de Andreu Plaza, con un partido espectacular del astro brasileño Ferrao.