Málaga y Celta han sido los encargados de inaugurar la Liga BBVA en esta temporada 2012/2013. Se presentaban ambos conjuntos en Balaídos con sensaciones distintas. Los de Pellegrini, intentando olvidar el verano de cambios y rumores y queriendo reafirmarse como equipo antes de disputar la previa de la Champions, mientras que los locales volvían a Primera tras cinco temporadas.

Con las ya conocidas ausencias en la plantilla del Málaga, Pellegrini apostó por Willy en portería, con Gámez y Monreal en los laterales, Demichelis y Weligton en el centro de la zaga, Toulalan y Camacho en el doble pivote, línea de tres para Joaquín –que se recuperó a tiempo de la contusión en el costado-, Isco y el canterano Portillo, y Seba como referencia en ataque.

En su regreso a la categoría de oro del fútbol español el Celta se mostró atrevido. No se achicó ante el Málaga y desde el inicio intentó plantarle cara a través del juego y las contras. El Málaga, por su parte, intentaba hacerse con el control del balón y llegar al área contraria a través de las combinaciones y cambios de juego. No obstante, ninguno de los dos logró meterse en el área contraria con peligro. Un lanzamiento de falta de Joaquín en el minuto 12 fue la primera ocasión del choque. El esférico fue atrapado por Javi Varas en dos tiempos. El malaguista fue también el protagonista de la segunda ocasión para el conjunto costasoleño, al dirigir una contra que acabó con disparo del gaditano. El guardameta exsevillista volvió a salvar a su equipo al repeler el balón. Este le cayó a Isco, que entraba por la izquierda, pero lo envió por encima del travesaño.

Poco a poco se fueron animando ambos equipos en ataque. Por parte de los locales, De Lucas aprovechó un error en la zaga blanquiazul –hoy vestidos de negro- para dar el primer susto, pero no el único. Minutos más tarde, un nuevo error en el marcaje dejó a Túñez solo para rematar de cabeza un balón que salió desviado.

La igualdad primó durante la primera mitad, en la que Celta y Málaga se disputaban por rachas el dominio del esférico, un control que no fue traducido en peligro, aunque sí en llegadas. Toulalan puso de nuevo a prueba a Varas al peinar un balón que le puso Isco tras saque de esquina botado por Joaquín. El ‘22’ malaguista lo intentó también sin éxito desde fuera del área, mientras que Álex López finalizó una elaborada jugada del Celta enviando el cuero a las manos de Willy, que tocó ligeramente para enviar a córner.

La primera parte no dio para más y, con el 0-0 en el marcador, Cerro del Grande decretó el inicio del descanso, en unos 45 minutos en los que el Málaga tuvo sendos errores defensivos que pudieron costarle algún gol. No en vano, la segunda mitad se inició con un nuevo fallo de Weligton, que obligó a Willy a sacar un balón de De Lucas. El brasileño no estuvo acertado durante el día de hoy.

Siguió intentándolo con más insistencia el Celta, de nuevo por mediación de De Lucas, cuyo disparo fue sacado por el portero malaguista, muy atento en sus intervenciones. El ‘22’ del Celta se convirtió en la pesadilla del Málaga con una nueva ocasión que salió lamiendo el palo de la portería. Aspas probó el lanzamiento lejano y así, los primeros minutos tras la reanudación fueron de total dominio del conjunto gallego, que parecía haber encontrado la fórmula para hacer daño a los visitantes.

Fabrice llegó y besó el santo

Con la falta de un ‘nueve’, el empate a 0 y más de media hora por delante, Pellegrini comenzó a mover banquillo, y lo hizo para hacer debutar a Fabrice Olinga, jugador del Atlético Malagueño. El delantero, de solo 16 años, entró por Seba para intentar buscar un rematador entre la zaga del Celta. El segundo cambio fue también ofensivo y ‘El Ingeniero’ dio entrada a Buonanotte por Portillo, mientras que el último cartucho lo gastó sacando a Eliseu por Joaquín.

El joven Fabrice tuvo una buena ocasión al recoger un rechazo tras un trallazo de Isco, pero su disparo salió fuera de la línea de cal. Tuvo otra más que repelió el poste, y en la siguiente no falló. Tras una buena jugada de Buonanotte, que se zafó de dos defensas, el argentino puso un centro que el camerunés no desaprovechó para abrir el marcador y poner en ventaja a su equipo a falta de menos de 10 minutos para el final. El ariete se convierte, además, en el jugador del Málaga más joven en debutar y en el goleador más joven en la historia de la Liga BBVA.

No tiró la toalla el Celta, que una vez más por mediación de De Lucas pudo poner el primero en su marcador, pero su envío lo repelió el poste, como hizo también con el de Cabral, en el minuto 92. Con un dominio igualado y un debut inmejorable de Fabrice se dio por concluido el encuentro, en el que el Málaga se llevó los tres puntos. Con el buen sabor de la victoria, los de Pellegrini dan carpetazo, de momento, a las dudas tras las marchas y comenzarán mañana a preparar la previa de la Champions, cuyo partido de ida tendrá lugar el miércoles en La Rosaleda.

Puntuaciones del Málaga