El hombre de la sonrisa permanente volvió a ser el protagonista de una de las jugadas del Atlético de Madrid en un estadio de Valencia, pero esta vez a su favor. Porque a Guilherme Siqueira se le atragantó Mestalla, pero no el campo del Levante, no el Ciutat de Valencia.
No pintaba bien la calurosa mañana de fútbol en Valencia con el 1-0 que Barral había firmado en el luminoso a la media hora de juego. Pero fue rápida la reacción del Atlético y apenas tres minutos después consiguieron poner las tablas en el marcador, obra de Siqueira. El brasileño apareció cual delantero goleador en el área de Mariño para rematar un centro de Tiago después de que el propio portugués hubiese recuperado la pelota. Una especie de tijereta mientras se caía daba el empate a uno al Atlético en el campo maldito de la jornada maldita para los de Simeone.
El brasileño apareció cual delantero goleador en el área de Mariño para rematar un centro de Tiago después de que el propio portugués hubiese recuperado la pelota
Era el primer gol del lateral con la elástica rojiblanca, algo que ya hubiera podido ocurrir, precisamente, en Valencia. El Atlético de Madrid viajó a la capital del Turia para enfrentarse al conjunto che en la jornada 7. En apenas 13 minutos el equipo dirigido por Nuno ya tenía un 3-0 a su favor que parecía -y fue- insalvable para los madrileños. Acortó Mandzukic con un gol a la media hora del encuentro y antes del final Siqueira se clavó su espina. Ya había fallado un penalti durante la pretemporada, en la gira que el equipo español hizo por América. Y aquel día volvió a errar desde los once metros. Mala suerte la del brasileño, que con el Granada tan solo había desperdició uno de los doce penaltis que tiró. Pero con el Atlético era distino, había fallado los dos penaltis que había tirado vistiendo los colores rojiblancos y Simeone no iba a darle más oportunidades. "El tirador es Mandzukic. Me lo pidió y le dije que sí. Muy simple. Falló dos penaltis en su carrera y los dos en el Atlético de Madrid. Ahora lo tendrá difícil para volver a patear", explicó Simeone en la rueda de prensa tras al derrota en Mestalla.
Pero 29 fechas después, en Valencia y sin pena máxima, Siqueira ha roto el mal fario. Ha marcado su primer gol como atlético y ha servido para mantener al equipo en el partido. El hombre de la sonrisa permanente, el lateral izquierdo que vino para pugnar su posición con otro lateral izquierdo y ahora se ve ensayando los saques de banda de un lateral derecho que ya le ha hecho sentarse en el banquillo en más de una ocasión, sigue sonriendo. Y ahora con gol.