Más de 3000 aficionados azules se desplazaron el pasado domingo a Zorrilla para vivir el reencuentro en la LFP de dos hermanos de fútbol, el Real Valladolid y el Real Oviedo. Muchos otros se quedaron en Oviedo y disfrutaron, como ya es habitual en la capital asturiana, del partido en sus bares de referencia. Oviedo vive el fútbol cada fin de semana como local pero también como visitante. Este domingo, Vavel se desplazó hasta la sede de la peña Doble-A para vivir el partido con los aficionados y conocer un poco más la historia de esta peña de reciente creación. 

A penas un año lleva la peña Doble-A funcionando, se fundó el pasado enero y ya ha vivido el ascenso del Real Oviedo a la categoría de plata. Algo que el oviedismo llevaba más de una década esperando. Casualidad o no, el significado del nombre está relacionado directamente con este hecho, pues Doble-A significa año de ascenso. Joaquín Miguel, presidente de la peña, nos cuenta que "aunque siempre quisimos subir, el año pasado era diferente." Y tras doce años en el barro, todo el oviedismo pudo celebrar el tan preciado ascenso.

Joaquín siempre tuvo una ilusión. Cuando viajaba acompañando a su equipo a otros lugares, especialmente en el País Vasco, veía que muchos bares estaban completamente ambientados en el equipo de la ciudad: bufandas, banderas, escudos... todo tipo de símbolos que impregnaban aquellos lugares y los hacían únicos a ojos de los que los visitaban por primera vez, y un segundo hogar para los aficionados de aquellos equipos. Ese fue el objetivo número uno de Joaquín cuando abrió el bar Doble-A: “Tuvimos muy claro que queríamos que fuera un bar en que todos los oviedistas se sintieran como en casa". El local está lleno de bufandas, fotografías, escudos y recuerdos de la historia moderna del Real Oviedo. El bar cuenta también con un rincón para todas las peñas del Oviedo, hueco en el que se pueden contemplar las bufandas de las distintas asociaciones de oviedistas. Con este gesto "intentamos hacer un poco de piña, que las distintas peñas nos conozcamos es importante", explica Joaquín.

El domingo aunque muchos integrantes de la peña se desplazaron hasta Valladolid, otros tantos tuvieron que conformarse con vivirlo desde el bar; pero, no solo tienen clientes en los partidos a domicilio. También los domingos en los que el Oviedo juega como local, peñistas y aficionados, que por la razón que sea no pueden ir al Tartiere, se dan cita allí cada fin de semana para disfrutar del ambiente futbolero, y en el mejor de los casos celebrar la victoria de su equipo.

Hoy en día la peña cuenta con 70 socios. Abierta para todo el mundo sin distinciones: “Intentamos que la persona mayor se sienta joven y educar de la mejor manera a los más pequeños”. Al grito de: “Sextos, estamos sextos” celebraron los aficionados azules la victoria del Real Oviedo en Pucela. Una victoria que coloca a los de Egea en los puestos de play-off de ascenso. Joaquín lo tiene claro: "Quiero subir, pero no me importa esperar un año. Hay que ser realistas. Hay que ir paso a paso". Parece complicado pero queda mucha liga por delante, muchos partidos por jugar, y demasiados puntos por disputar como para acertar en un pronóstico. ¿Volverá la peña Doble-A a hacer gala de su nombre esta temporada?