Sorpresa mayúscula en Old Trafford. El Villarreal sorprende a Europa con un empate a cero contra el Manchester United en la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions League. Los hombres de Pellegrini siguen dando de qué hablar y es que no han perdido ninguno de los cinco partidos jugados como debutantes en Copa de Europa. El partido fue poco vistoso, los amarillos consiguieron mantener a raya en los noventa minutos a los "red devils", que salieron en tromba a por el partido aunque carecieron de orden en el ataque. Ahora, el Villarreal vislumbra los octavos de final mientras que el Manchester deberá sacar algo positivo en Portugal si quiere mantenerse en la competición.
Primeros compases eléctricos
La consigna era clara para los de Ferguson: marcar cuanto antes y que los tres puntos se queden en Inglaterra. El United se volcó en el ataque para conseguir el objetivo en los primeros minutos. Wayne Rooney avisó en el minuto dos con un tiro que atajó el portero Barbosa. Después de las acometidas inglesas y los nervios iniciales, el Villarreal se hizo con el balón por momentos. Marcos Senna dirigía el juego de los suyos aunque no conseguirían demasiadas ocasiones, en parte, por las ausencias de Juan Román Riquelme y Diego Dorlán, los hombres más importantes en el ataque castellonense.
Juego poco vistoso en la primera parte
Cuando los nervios y la adrenalina acumulada se agotaron en la primera parte, el juego de los dos conjuntos se apagó y la acción se concentró en el centro del campo. Van der Sar y Barbosa vieron cómodamente los toros desde la barrera en los primeros 45 minutos. Los ingleses pusieron ganas pero esas ganas no se tradujeron en ocasiones y orden, sino más bien en imprecisiones y juego trabado. El Villarreal se mantuvo ordenado sabiendo lo que venía y la necesidad que tenía el Manchester de marcar para seguir vivo en la competición.
Orden amarillo
La defensa del "submarino", liderada por Gonzalo Rodríguez, supuraba una y otra vez los intentos del conjunto inglés, que veía como el tiempo, divino tesoro, se agotaba a la vez que la ilusión de los aficionados. Cristiano Ronaldo y Rooney no eran capaces de perforar la portería de Barbosa. La desilusión derivó con el paso de los minutos en juego brusco; Tacchinardi y Scholes fueron amonestados por sendas entradas fuertes.
Despierta Old Trafford
Poco a poco, a raíz de la lucha en el campo la afición inglesa despertó y las ocasiones locales se sucedieron en la segunda parte. Ronaldo tuvo un balón clarísimo en un centro de Wes Brown en el 67 pero salió desviado. Un balón que minó la moral "devil" junto al orden táctico amarillo, que poco acostumbrado a ello, brilló en esa faceta en "El Teatro de los Sueños" ante un hueso como es el United. El conjunto de Sir Alex tuvo más oportunidades para marcar pero no lo consiguieron. Por su parte, Luciano Figueroa pudo adelantar a los suyos a balón parado en un remate que no llegó por centímetros.
El Villarreal, líder a falta de un partido
El United siguió intentándolo hasta el final. Wayne Rooney tuvo en sus botas en el 86 el partido en un golpeo desde fuera del área que se marchó por muy poco cerca de la portería amarilla. El "submarino" sale de Old Trafford como flamante líder del grupo D con un partido aún por disputarse y dejando en la cuerda floja a un grande como es el United. Los de Ferguson son terceros y se jugarán el pase a octavos de final ante el Benfica.