El Villarreal CF cumple 93 años

Hoy, 10 de marzo de 2016, el Villarreal CF cumple 93 años de pasiones, sentimientos y emociones. Felicidades, Villarreal Club de Fútbol.

El Villarreal CF cumple 93 años
Foto: Web oficial del Villarreal CF
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Por Ángel Morán

Tal día como hoy, hace 93 años, nació el Villarreal Club de Fútbol. Su año, 1923. Sus colores, azul y amarillo. Su hogar, Vila-real. Su fortín, El Madrigal. Sin embargo, queda por nombrar un elemento fundamental para entender lo que significa un club como el Villarreal: la afición.

Es curioso que alguien que no haya nacido en la ciudad castellonense se aventure a explicar lo que supone ser del Villarreal. Y es que este pequeño gran club no cuenta con la hinchada más numerosa, ni tampoco con el estadio de mayor capacidad, pero síposee un escudo respaldado por gente fiel, fiel a su equipo, y que estará con él en las buenas y en las malas. Con el último descenso, muchos abandonaron el barco y quedaron los que, lejos de fijarse en la plantilla y en el número de victorias, se centraron en lo realmente importante: el Villarreal, el club, la institución. 

El camino no fue sencillo. Se escaló el Everest en unos pocos años, y la caida fue aún más dolorosa de lo que cabría esperar. El caviar y los lujos abandonaron El Madrigal. La sintonía de la Champions dejó de escucharse por la megafonía del estadio castellonense, y nuestro club volvió a la realidad de antaño. Como si de un fugaz regreso al pasado se tratase, el Submarino Amarillo cayó al infierno de Segunda División tras doce años de gloria, éxitos y noches europeas. 

Pero allí estaba la afición, con los héroes, para levantar a nuestro amado Villarreal CF. La multitud de obstáculos y dificultades se vencieron con humildad y trabajo, misma receta que utilizaron los héroes de la 97/98 y la 99/00, y el pequeño en tamaño y grande en corazón, regresó a Primera División. Y esa fue la mayor alegría de todos y cada uno de los groguets, que esa tarde volvieron a ser partícipes de la historia de nuestro club. 

Los orígenes

El 10 de marzo de 1923, se funda el CD Villarreal, como principal estandarte del fútbol de la localidad castellonense. Los protagonistas de ese gran día fueron José Calduch Almela, José Martínez Aguilar y Carlos Calatayud Jordá, que acompañados por una serie de vocales, proceden a la formación del club. El Villarreal era una realidad.

Después de casi dos décadas de fútbol, y tras perder la eliminatoria por el ascenso a Segunda División frente al Cartagena (5-0 en la ida a domicilio y 3-1 en la vuelta en casa), la Guerra Civil y la posguerra ponían punto y final a la aventura del CD Villarreal

Sin embargo, en 1942 se funda al CA Foghetecaz, compuesto por aficionados al extinto CD Villarreal. Cuatro años más tarde, se federa el club con el nombre de CAF Villarreal y la zamarra blanca pasó a ser amarilla (por la falta de camisetas blancas en la tienda). 

Finalmente, en 1954 se produce la definitiva refundación del club y el CAF Villarreal pasa a llamarse Villarreal Club de Fútbol. La historia y la gloria le esperaban a la vuelta de la esquina, y ni los más optimistas se esperaban lo que supondría el Villarreal CF en un futuro. 

Grandes éxitos del club

Primer ascenso a Segunda 

Más de dos décadas después de la refundación, tras una larga travesía por categorías regionales y tres campañas logrando la permanencia en  Tercera División, la primera oportunidad del Villarreal para hacer historia se presentó en la temporada 1969/1970. El conjunto castellonense fue campeón del grupo 5 de Tercera, finalizando el campeonato con 56 puntos. Erró en la primera oportunidad ante la Unión Popular Langreo (1-0 en Asturias y 1-1 en Vila-real), pero a la segunda el Submarino consiguió el ascenso a Segunda División por primera vez en su historia, al doblegar por 2-1 al Bilbao Athletic en un partido de desempate disputado en el Santiago Bernabéu (2-1 en Bilbao y 2-1 en El Madrigal).

Subir a Primera no fue imposible

Tras unos años de alternancia entre Tercera y Segunda B, el Villarreal consigue consolidarse en Segunda División durante cinco años. Pascual Font de Mora deja la presidencia al término de la 96/97 y Fernando Roig Alfonso se convierte en accionista mayoritario del Villarreal CF

La temporada 97/98 fue una campaña inolvidable. El Villarreal finalizó el campeonato en la cuarta posición, con 73 puntos, por lo que disputaría el play-off de ascenso a Primera. Su rival fue la SD Compostela, cuarto clasificado por la cola en Primera División. Los amarillos cosecharon un 0-0 en la ida disputada en El Madrigal, y la balanza se decantó por el conjunto castellonense en el encuentro de vuelta disputado en San Lázaro (1-1). El gol de Alberto significó el ascenso a la Liga de las Estrellas, la Primera, aquella que Font de Mora catalogó como ''imposible de llegar''. Al final, nuestro equipo, una vez más, rompió la utopía y se ganó el derecho a soñar en lo más alto del firmamento. 

Los primeros éxitos europeos

El Villarreal debutó en competición europea en el año 2002, disputando la Copa Intertoto y cayendo en la final frente al Málaga (0-1 en El Madrigal y 1-1 en La Rosaleda). Sin embargo, en la edición del 2003, el Submarino se alzó con el título. El primer paso fue el Brescia, al que derrotaron por 2-0 en El Madrigal y posteriormente eliminaron con el empate (1-1) en tierras italianas. Después, el rival del equipo amarillo fue el Brno, conjunto de la República Checa. Los castellonenses firmaron tablas a domicilio (1-1) y doblegaron a los checos en El Madrigal (2-0). Finalmente, el Villarreal venció al Heerenveen holandés en la final de la Copa Intertoto 2003 (1-2 en Holanda y 0-0 en Castellón), consiguiendo el título y cosechando su primer trofeo europeo

Su victoria en la final de la Intertoto 2003 significó el billete que permitió al Submarino Amarillo disputar la Copa de la UEFA 03/04. En su primera participación en dicha competición, los castellonenses alcanzaron las semifinales del torneo, quedándose a las puertas de la final. El Valencia, eterno rival, fue su verdugo. Trabzonspor (0-0 en El Madrigal, 2-3 en Turquía), Torpedo de Moscú (2-0 en Vila-real, 1-0 en Rusia), Galatasaray (2-2 en Turquía, 3-0 en El Madrigal), Roma (2-0 en Castellón, 2-1 en Italia) y Celtic de Glasgow (1-1 en Escocia, 2-0 en España) fueron los rivales a los que se enfrentó el Villarreal en su aventura por Europa. En semifinales, los amarillos se medieron al conjunto che, cosechando un empate (0-0) en El Madrigal y perdiendo (1-0) en Mestalla, con un gol de Mista.

En ese mismo año 2004, el Villarreal repitió título en la Copa Intertoto. Los amarillos doblegaron a Odense (0-3 en Dinamarca y 2-0 en El Madrigal), Spartak de Moscú (1-0 en Vila-real, 2-2 en Moscú) y Hamburgo (1-0 en El Madrigal, 0-1 en Alemania) hasta llegar a la final, en la que se midieron a otro equipo español, el Atlético de Madrid. Cambiando la historia de la edición de 2002, en la que cayó ante el Málaga en la final, los castellonenses derrotaron al conjunto colchonero en la tanda de penaltis (3-1) tras perder (2-0) en el Vicente Calderón e igualar la eliminatoria en su feudo (2-0)

A las puertas de la final de Paris

Una gran campaña liguera en la temporada 04/05 permitió al Villarreal disputar la previa de la UEFA Champions League 2005-2006. Sin duda, estamos ante el mayor éxito de la historia del club, la mayor gesta lograda por el club castellonense. En su primera participación en la principal competición continental de clubes, el humilde Submarino Amarillo se quedó a un paso de disputar la finalísima de Paris, ante el FC Barcelona, y para ello tuvo que superar una larga serie de obstáculos. 

El rival en la fase previa fue el Everton, al que doblegó tanto en Inglaterra (1-2) como en España (2-1). En la fase de grupos, quedó encuadrado en el grupo D, junto al Lille francés (0-0 y 1-0), Benfica (1-1 y 0-1) y el poderoso Manchester United (0-0 y 0-0), y terminó pasando a octavos como primero, con 10 puntos

En octavos de final esperaba el Glasgow Rangers. Los amarillos empataron en el Ibrox Park (2-2) y en El Madrigal (1-1), pero obtuvieron la clasificación para cuartos por el valor doble de los goles marcados fuera de casa. El Inter de Milán, un titán europeo, fue el siguiente rival del Villarreal. Los hombres de Manuel Pellegrini cayeron por la mínima en el Giussepe Meazza (2-1), pero un legendario gol de Rodolfo Arruabarrena con la testa dio el pase a semifinales al conjunto amarillo. El 1-0 de El Madrigal propulsó al Villarreal a la gloria. 

El último escollo del Submarino era el Arsenal inglés. El conjunto castellonense sufrió de lo lindo en Highbury y al final perdió (1-0) con un gol de Kolo Touré. En el partido de vuelta, El Madrigal fue una caldera. La afición amarilla creía ciegamente en la remontada, pero el sueño se truncó en el minuto 89. El Submarino dominó durante todo el partido, pero fue incapaz de marcar ese gol que empatase la eliminatoria y forzase la prorroga. Faltando solo un minuto para el 90', el francés Clichy derribó al amarillo Jose Mari en el área londinense y el colegiado ruso Valentin Ivanov señaló penalti. Juan Román Riquelme, el 8 del Villarreal y experto lanzador desde los once metros, miró fijamente a la portería de Lehmann, cosciente de lo que significaría meter ese penalti. Sin embargo, los nervios pudieron con el argentino y el guardameta del Arsenal atajó el flojo lanzamiento. El sueño del Villarreal en la Champions concluyó.

Subcampeones de Liga

Gestas europeas aparte, el Submarino también ha hecho historia en la liga española. Además del tercer puesto logrado en la 04/05, y de la clasificación como cuarto en la 10/11, el club castellonense puede hablar de un éxito mayor: ser subcampeón

Lo consiguió en la temporada 2007-2008, con Manuel Pellegrini en el banquillo. La campaña liguera fue espectacular. Los amarillos concluyeron el campeonato en segunda posición con 77 puntos, a ocho del campeón Real Madrid. 24 victorias, 5 empates y 9 derrotas, 63 goles a favor y 40 en contra. Estadísticas espectaculares. 

Partidos como el 0-3 al Valencia en Mestalla, la goleada (3-1) al FC Barcelona en El Madrigal o la increíble remontada (3-4) en el Calderón al Atlético de Madrid, quedarán siempre en la memoria del aficionado amarillo, como exponentes de una temporada histórica.

El Mini Submarino asciende a Segunda

El Villarreal B cuajó una temporada 2008-2009 sensacional. Contra todo pronóstico, y con el fútbol vistoso y alegre por bandera, el filial castellonense finalizó el campeonato en segunda posición de su grupo en Segunda División B, con 72 puntos, solo uno por detrás del campeón CD Alcoyano. 22 victorias, 6 empates y 10 derrotas, 73 goles a favor y 41 en contra, números que elevaron al Mini Submarino a disputar los play-off de ascenso a Segunda División

En la primera fase, el Villarreal B se midió al Zamora CF, al que derrotó por 0-2 en el Ruta de la Plata, y por 2-0 en el Mini Estadi. En segunda ronda, el filial amarillo se enfrentó al Lorca Deportiva CF, obteniendo nuevamente la victoria en ambos encuentros de la eliminatoria (1-0 en Miralcamp, 2-3 en Lorca). Finalmente, en tercera ronda el Villarreal B se vería las caras con el Real Jaén.

La ida, disputada en El Madrigal ante 12.000 espectadores, concluyó 0-0, por lo que todo se decidiría en Jaén. La vuelta, con el Nuevo Estadio de la Victoria como escenario, fue un partido apasionante. Los locales se adelantaron con un gol de Esparza (31'), pero el Mini Submarino remontó con goles de Gerard Bordás (41') y Chando (59'). El 1-2 definitivo significó el primer ascenso del Villarreal B a Segunda División, en la cual permaneció durante tres temporadas. 

Crueles semifinales de Europa League

En la temporada 10/11, el Submarino repitió la misma historia que en la campaña 03/04, alcanzando las semifinales de la UEFA Europa League (antes, Copa de la UEFA). El final fue, nuevamente, muy cruel para los amarillos. 

Tras la clasificación como séptimo al término de la 09/10, y la sanción de la UEFA al RCD Mallorca, el Villarreal ocupó la sexta plaza del club bermellón y tuvo que disputar una ronda previa antes de acceder a la fase de grupos. Su rival fue el FC Dnepr Mogilev, al que goleó 5-0 en El Madrigal y posteriormente eliminaría venciendo 1-2 en Bielorrusia. 

El conjunto castellonense se clasificó primero del grupo D, en el que quedó encuadrado junto a Brujas (2-1 y 1-2), PAOK (1-0 y 1-0) y Dinamo de Zagreb (1-0 y 3-0). En dieciseisavos de final, su rival fue el Nápoles de Cavani, Lavezzi y Hamsik, al que eliminaría tras una igualada eliminatoria (0-0 en San Paolo y 2-1 en El Madrigal). 

El rival en octavos fue el Bayer Leverkusen, un duro hueso alemán. Sin embargo, los amarillos ganaron en la ida disputada en el Bay Arena (2-3), y en la vuelta en Vila-real doblegaron al equipo alemán (2-1) para certificar el pase a cuartos de final. 

En cuartos, el Villarreal se midió al campeón holandés: el Twente. El Madrigal fue testigo de una de las mayores goleadas europeas del Submarino que se recuerdan, un 5-0 que dejaba al equipo castellonense con un pie y medio en semifinales. La vuelta fue un mero trámite que los hombres de Garrido resolvieron con una victoria (1-3)

Con la moral por las nubes, los amarillos visitaron Do Dragao para enfrentarse al FC Porto en las semifinales del torneo. Los hombres de Juan Carlos Garrido cuajaron una buena primera parte, en la que Cani marcó un gol que sacó muchas sonrisas en la grada visitante del estadio portugués. Sin embargo, Radamel Falcao fue un huracán en la segunda mitad y endosó cuatro tantos a los amarillos, que junto al gol de Guarín, conformaban un contudente 5-1. La ansiada final de Dublín se escapaba. 

Aún así, el Villarreal creía en la remontada. Una vez más, la afición amarilla se congregó en El Madrigal para aupar a su equipo al 4-0 necesario para alcanzar la final. Cani adelantó a los locales en el 17', pero un disparo de Hulk se envenenó al golpear en Musacchio y entró en la portería de Diego López. Al descanso, y con 1-1 en el marcador, el Villarreal bajó los brazos y despertó del sueño. Falcao marcó el 1-2 en el 48', gol que sirvió para despertar el orgullo del Submarino Amarillo, que, ya eliminado, quiso regalar una victoria final a su afición. Capdevila empató el choque en el 75', y Rossi marcaba el 3-2 de penalti en el 80'. Otra vez, con la miel en los labios. 

Fulgurante regreso a Primera 

Tras cuajar una grandísima temporada 2010-2011, el Submarino vivió una campaña 2011-2012 horrible, en la cual descendió a Segunda División tras caer eliminado en  Champions y Copa, y realizar un campeonato liguero realmente malo (41 puntos). 

La restructuración del club fue muy notable. Se cuadraron las cuentas, estabilizando económicamente la institución, y apostando fuerte por la cantera. Las estrellas Borja Valero, Nilmar o Diego López abandonaron la disciplina amarilla, dejando paso a los Manu Trigueros, Moi Gómez o Juan Carlos . El elegido para capitanear el Submarino Amarillo en la travesía por los infiernos de Segunda fue Manolo Preciado inicialmente, pero su fallecimiento obligó a buscar un sustituto en tiempo record. Fue Julio Velázquez, entrenador del Villarreal B por aquel entonces, y ex entrenador del Villarreal C.

La primera vuelta en la Liga Adelante 12/13 fue irregular. Claros y oscuros. Destellos como la goleada (4-0) al Alcorcón, el gran partido en El Sardinero ante el Racing (0-3) o la eficacia en la victoria (2-0) ante el Córdoba en El Madrigal. Sin embargo, el tramo final de la primera vuelta del campeonato fue decepcionante, con mayoría de empates y derrotas en detrimento de las victorias. Pinchazos como la derrota en casa ante el Barça B (1-2) o los hundimientos a domicilio ante Elche (1-0), Recreativo (2-0) o Girona (2-0) terminaron por sentenciar al técnico Julio Velázquez

El elegido para ocupar el puesto dejado por el entrenador salmantino fue Marcelino García Toral, experto en ascensos (Zaragoza o Recre), y que se encontraba sin equipo tras su destitución como técnico del Sevilla en febrero de 2012. La llegada del asturiano, unida a los fichajes de invierno como Jonathan Pereira, Jeremy Perbet, Farinós o Javier Aquino, catapultó al Submarino en la segunda vuelta

El debut de Marcelino como técnico amarillo fue inolvidable. Inolvidable por lo esperpéntico que supuso para aquellos que acudieron al Estadio Alfredo Di Stefano a ver al equipo. El Villarreal cayó por un contundente 5-0 ante un Real Madrid Castilla liderado por Morata, Jesé y Cheryshyev. Pero eso, lejos de hundir al vestuario, sirvió de motivación. 

La segunda vuelta fue espectacular. La goleada al Sabadell en El Madrigal (3-0) sirvió de punto de partida para un Submarino que arrasó a todos sus rivales menos al Elche, que terminó logrando la primera plaza y se proclamó campeón de la categoría (el partido ante el Elche fue la única derrota en toda la segunda parte de la liga, 2-3 en El Madrigal). 13 victorias (las últimas cinco consecutivas), 5 empates y 1 derrota fue el balance del Villarreal de Marcelino en Segunda División.

Finalmente, y tras el tropiezo ante el Elche en casa, los amarillos encadenaron cuatro victorias consecutivas, ante Alcorcón (1-3), Girona (4-1), Xerez (3-2) y Barça B (0-3). En el último encuentro de liga, disputado en El Madrigal, el Villarreal se enfrentó al Almería, tercero en la clasificación y solo un punto por debajo de los castellonenses. La final por el ascenso a Primera División se la llevó el Villarreal con un legendario tanto de Jonathan Pereira. Sin duda, uno de los momentos más grandiosos de la historia de nuestro club.

A un paso de la final de Copa

La vuelta a Primera le sentó de maravilla al Villarreal, que finalizó sexto en el campeonato liguero en la 13/14 y se ganó un puesto en la UEFA Europa League. La temporada pasada, pese a disputar competición europea y volver a terminar sextos en la clasificación, destacó por la trayectoría en Copa del Rey. Y es que, por primera vez en su historia, el Villarreal alcanzó las semifinales del torneo, siendo su verdugo el FC Barcelona. Hasta la 14/15, a lo más lejos que había llegado el equipo amarillo fue a cuartos de final.

En dieciseisavos, el Villarreal se enfrentó al Cádiz CF, uno de los pocos conjuntos de Segunda B que sobrevivían en la competición. Los castellonenses ganaron (1-2) en el Ramón de Carranza y golearon al equipo cadista (3-0) en El Madrigal. La Real Sociedad esperaba al Submarino en octavos. Un golazo de falta, obra de Bruno Soriano, decidió la ida disputada en Vila-real (1-0), mientras que la locura de Anoeta dio esperanzas al equipo vasco, pero el encuentro finalizó con empate (2-2)

En la ida de cuartos de final, el Villarreal derrotó al Getafe CF en El Madrigal (1-0) con otro libre directo del capitán Bruno Soriano. En el encuentro de vuelta, los azulones pelearon y buscaron empatar la eliminatoria, pero una contra del equipo amarillo fue finalizada de forma soberbia por Gerard Moreno para firmar el 0-1 y el pase a semifinales de Copa. 

El titán azulgrana fue el siguiente rival del Submarino. Unos días después del partidazo liguero en el Camp Nou (3-2), el conjunto castellonense perdió en el feudo del Barça (3-1), pero salió con vida. Como en las eliminatorias ante Arsenal y Oporto, la afición amarilla se volcó en la vuelta, llenando las gradas de El Madrigal e intentando aupar al equipo a soñar con la remontada. Se necesitaba un 2-0, resultado arto complicado de lograr teniendo en cuenta el tridente del equipo catalán: Messi, Neymar y Luis Suárez. 

El '11' del Barça marcó el 0-1 en el 4', derrumbando las ilusiones de la grada. Sin embargo, el Villarreal siguió creyendo y arrolló en juego y ocasiones al conjunto de Luis Enrique, errando en la finalización de las jugadas ofensivas y pecando de falta de puntería. Por fin, al filo del descanso, un buen centro de Jaume Costa fue aprovechado por el mexicano Jonathan Dos Santos para empatar el partido

El Madrigal aún creía en la remontada. Los amarillos siguieron destrozando al Barça en los primeros 15 minutos de la segunda mitad, hasta que Tomás Pina fue expulsado por una dura entrada sobre Busquets. En ese momento, el Villarreal bajó los brazos y lo dio por imposible. Lo intentó de todas las maneras, pero la pelota no entró. Luis Suárez y Neymar cerraron un partido que acabó en el 64', cuando los locales se quedaron con diez. El 1-3 fue realmente injusto, pero el fútbol no siempre lo es. Y el Villarreal puede dar fe.