Este domingo (17.00 horas) en 'O Vao' se van a dar circunstancias poco parejas. Y es que el Coruxo, uno de los equipos revelación de la temporada que prácticamente ya tiene la salvación en su mano, recibe a la Arandina, penúltima clasificada e incapaz de ganar lejos de su feudo hasta ahora. Eso sí, los ribereños llegan a Vigo con un ligero impulso tras condenar definitivamente a la UD Somozas el pasado fin de semana.

Tranquilidad por bandera

 El Coruxo tiene en su mano la oportunidad de asaltar la Copa del Rey. Es el objetivo más llamativo que queda por afrontar para la escuadra de Rafa Sáez, ya asentada -y de qué manera- en la categoría. Después de 27 partidos, los gallegos suman 38 puntos y mantienen vivas las opciones de abrir un nuevo hueco en su historia. Lo cierto es que recibirán a su próximo rival sin presión alguna, pero no por ello van ponérselo fácil, todo lo contrario. Hasta el momento, solo un equipo ha sido capaz de sumar de tres en 'O Vao' y fue el líder. Difícil superar en su terreno de juego a un club que en su feudo es un auténtico rodillo.

La única parte negativa llega en el registro de goles. El cuadro vigués lleva a sus espaldas 38 dianas en contra y es bastante propenso a sufrir cuando los rivales marcan. Por si fuera poco, el orgullo viene herido tras la abultada derrota del pasado fin de semana en Barraña ante el Boiro. Las buenas noticias están en la enfermería. Sáez no tendrá problemas para hacer la convocatoria, ya que la totalidad del plantel está disponible. Así, Pedro Vázquez, Antón o Camochu -máximo anotador con seis tantos- podrían estar en el once inicial este domingo. El Coruxo tiene poco que perder y mucho que ganar.

Vencer lejos de 'El Montecillo'

Como si estuviera encañonada por una pistola. Así acude la Arandina a 'O Vao'. La escuadra ribereña puso fin la semana pasada a más de tres meses sin conocer el triunfo después de vencer y condenar al Somozas. Ahora los blanquiazules quieren centrarse en la salvación, una auténtica proeza que solo podrá lograrse si se gana fuera de casa, por el momento asignatura pendiente para los pupilos de Emilio Ferreras. El feudo gallego podría ser el primer escalón hacia el éxito.

En la ida, la Arandina goleó (4-0) a la escuadra gallega / Gadea Casado (Arandina CF)

Jugar con obligación y necesidad puede ser un problema para la entidad burgalesa, pero no queda otra. De los 33 puntos que restan por disputar, habría que conseguir al menos 20 para poder hablar a final de temporada de permanencia. Lograrlo solo será posible si la defensa mantiene el buen nivel mostrado en los últimos partidos y es encabezada por un imparable Rubén Garcés. Los problemas con el gol parecen haberse solucionado, por lo que la preocupación se traspasa a la importancia del choque y al temor de no sumar en Vigo. 

Emilio Ferreras no podrá contar -al igual que en los últimos partidos- con Mauri y Charlie Took. Las dudas se plantean en portería y en la zona ofensiva. Zabal podría volver al once tras cumplir sanción, pero antes debería superar a un Montiel que demostró reflejos el pasado fin de semana. Arriba la duda corre por las bandas. Ruba y Carlos Portero (máximo goleador del equipo) son dos de los jugadores más en forma, pero comparten posición. No sería de extrañar que N'Doye cayera al banquillo y que el extremo toledano cambiara de banda. La Arandina sabe que debe arriesgar y si ha de morir, deberá de ser matando. 

Posibles onces

Coruxo: Alberto; Campillo, García, Rubén, Villarejo; Fernando Beltrán, Iosu Villar, Antón de Vicente; Jorge, Camochu, Pedro.

Arandina: Zabal; Edu Payá, Garcés, Trigueros, Nacho; Saúl, Plaza; Ruba, Leo Ramírez, Carlos Portero y Edgar.